El de tu familia. El que tienes solo con tu madre, el de la vida sana, el de antiguos alumnos del insti, el de la universidad, el de "cómo molamos somos los mejores ouh yeah", el de "a ver cuando una cenita, eh" y el que más me gusta: el grupo en el que te quedas tú solo porque el resto ha salido.
Duro.
Entrar a un grupo de WhatsApp es como una secta. Una vez llegas ahí, es casi imposible salir. Que lo que realmente nos gustaría es poder escribir: "¿Alguno de vosotros se ha planteado montar una empreas". Pero claro, es duro tener que escuchar algo así. Sobre todo para las personas sensibles, que siempre hay alguna y además coincide con ser la que creó el grupo.
Así que si vas a irte, por lo menos hazlo por la puerta grande.
Salida a la francesa
Aprovecha cualquier situación para largarte. Di que fue un error mal medido, que de repente no sabías cómo pero estabas fuera. Tendrás la sensación de haber ganado la batalla pero en el futuro no te enterarás ni de un solo puto plan porque todo estará en el grupo del que te has ido.

Mientras todos duermen

En plena ebullición de contenido
Si hay algo en común en todos los grupos es que siempre hay un happy de la vida que tiene que dar los buenos días todas las santas mañanas. Y allá que van todos algunos porque lo llevan en la sangre y otros porque son unos bien quedaos' que responden con un: ¡a por el día! ¡hoy va a ser el mejor día de la semana! Y de repente ya no estás en un grupo de WhatsApp sino en un mundo de Mr Wonderful. Aprovecha los mensajes mañaneros para salir y hacerlo de forma desapercibida.

The King Of The North
Hazte con el dominio total y comenta la posibilidad de ser también administrador del grupo. Cuando te hayas ganado la confianza del rey actual, atribúyete el poder y elimina el grupo para siempre.

Fácil. Salir de un grupo de WhatsApp da tranquilidad, mejora la calidad de vida y nos hace inmunes a la estupidez humana. No tengas miedo, lo haces una vez, y el resto vendrán rodadas.