Tres episodios recorren uno de los casos más famosos de todo este país: la desaparición y el asesinato de la joven Marta del Castillo. Han pasado más de 12 años pronto se cumplirán 13 y su cuerpo aún no ha sido encontrado. Su desaparición acaparó absolutamente todos los titulares y conmocionó al país entero en enero del año 2009, concretamente a partir del 24 de enero, la noche en la que ella salió de su casa y jamás volvió. A día de hoy sabemos que se trató de un homicidio pero de todos los acusados solo uno de ellos está en prisión: Miguel Carcaño. Investigación, interrogatorios y especulaciones no solo por parte de las autoridades sino también de los medios, la sociedad y las hasta siete versiones que el asesino ha dado sobre lo que ocurrió aquella noche.
No hay descanso
Ninguno de los implicados revela el paradero del cuerpo de la joven y, a pesar de que Miguel Carcaño ha dado varias ubicaciones, ella no se encontraba en ninguna. La familia aún sigue, por tanto, con la herida abierta, incapaz de tener la paz de saber exactamente qué ocurrió. La miniserie de Netflix se titula ¿Dónde está Marta? Y da voz a la familia, amigos y amigas, periodistas y abogados, además de incluir imágenes de los juicios, entrevistas y otras investigaciones que tuvieron lugar durante el año 2009 y posteriormente. Esta miniserie está dirigida por Paula Cons, periodista, guionista, documentalista y cineasta que se ha especializado en ficción basada en hechos reales.
“Marta del Castillo, una joven sevillana de 17 años, había hecho planes para hablar con Miguel Carcaño, con quien había mantenido una relación. Nunca regresó a casa. Cinco sospechosos, siete versiones diferentes del asesino confeso, dos sentencias contradictorias, una persona acusada de encubrimiento y el cuerpo de la víctima sigue desaparecido”, así se presenta parte de la sinopsis oficial de Netflix. Los nombres de las personas implicadas en el caso son: Miguel Carcaño, Samuel Benítez presunto cómplice, Javier García Marín, alias “el Cuco” quien en el momento de su detención era menor de edad, Francisco Javier Delgado Moreno, hermanastro de Miguel Carcaño y María García Mendaro, novia del hermanastro que, como él, se halla en libertad condicional.
Última versión
La miniserie de Netflix cuenta, también, con las palabras y la aparición del hermanastro de Miguel Carcaño, que aparece de espaldas con una capucha y sigue defendiendo su inocencia a pesar de que la última versión la que el padre de Marta del Castillo más cree lo incrimina a él. Explica Carcaño que su hermanastro y él tuvieron una pelea aquella noche, Marta intervino, el hermanastro le dio un golpe que acabó con su vida y luego ambos se deshicieron del cadáver en Majaloba. Esta es la última versión que está sobre la mesa y que Carcaño explicó al padre de Marta cuando este fue a hablar con él a prisión. El cuerpo de ella tampoco estaba en ese lugar.
La historia se cuenta desde muchos puntos de vista y es muy directa. Cualquier persona que crea tener algo de idea sobre lo que ocurrió seguramente se quede perpleja con toda la información sumamente detallada y sus más de 80 horas de entrevistas e investigación que esta miniserie ofrece. A pesar de que se muestran varios puntos de vista, la miniserie se posiciona: deja claro que la policía se quedó corta a la hora de movilizarse ante el primer aviso de desaparición, algo que podría haber impedido todo lo que ocurrió después.
Los tres episodios
Cada uno de ellos dura aproximadamente una hora. El primero, titulado Apagado o fuera de cobertura comienza con la madre de Marta, Eva, leyendo. Lo que lee es lo que ella misma ha ido escribiendo sobre todo lo que pasó aquellos días, para no olvidarse. En este primer contacto con la historia se cuenta con el relato de los familiares y amigxs de Marta describiendo la noche de la desaparición, lo que hicieron, cómo reaccionaron y la primera explosión mediática.
El segundo capítulo titulado Red de mentiras muestra la intensa búsqueda del cuerpo de Marta en todos y cada uno de los puntos que se iban marcando mientras los sospechosos modificaban una y otra vez su versión de los hechos. Es una de las partes donde más detalles se dan y donde es posible observar las dudas y las mentiras de cada uno de ellos: versiones que no se sostienen, explicaciones que ellos dieron en aquel entonces y que parece surrealistas. El último capítulo se titula ¿No hay más preguntas, señoría? Y es el capítulo más próximo a la actualidad. Es aquí donde aparece un poco de esperanza.
La esperanza y el dolor
El último capítulo muestra los diferentes juicios y los procesos judiciales pero su parte más reveladora es que cuenta con el análisis de nuevas pruebas. A raíz de que la producción de la serie solicitara ciertos datos móviles para poder completar la cronología de los hechos, se descubrió que muchos de esos datos no existían porque no se habían investigado. En concreto, en estos años no se había investigado la geolocalización de los móviles de los presuntos implicados y, a pesar de que ha pasado mucho tiempo, hoy podrían analizarse y podrían hacer que se sitúe a cada uno de ellos en un punto concreto para reconstruir el camino que hicieron.
Eso sí, su familia, que incluso durante la grabación se rompe en varias ocasiones, no ha podido dejar atrás el dolor. Conectas de tal forma con ellos, su relato y sus heridas que viajas hasta aquellas calles y que sientes esa frustración clavada en los huesos. Desde el 24 de enero del año 2009 la luz de la cocina de la casa en la que vivía Marta se deja encendida. Absolutamente cada noche. El padre de Marta dice que es un faro, para que ella siempre sepa que ahí está su hogar.