Angelina Jolie no ha pasado por su mejor época vital. Pero este mes solo vamos a escuchar hablar de ella por sus dotes como actriz y por su empeño en su último trabajo de actuación, que le ha llevado incluso a aprender durante 7 meses a cantar ópera.
Angelina Jolie ha vuelto y lo ha hecho por la puerta grande: presentando su primer gran papel en años en el Festival Internacional de Cine de Venecia. Muchxs ya dicen que su actuación en ‘Maria’, del director chileno Pablo Larraín, va camino de ganarse nominaciones en los Óscar y en los Globos de Oro.
Además, no deja de ser significativo que su reaparición en la gran pantalla sea para interpretar a Maria Callas, la mayor diva de la ópera que haya existido jamás y quien sufrió toda su vida por su fama y sus relaciones. Maria Callas nació en 1923 en Manhattan y fue una de las mayores sopranos del siglo XX. La apodaron “La Divina” y tenía solo 53 años cuando murió de un ataque cardíaco en su casa de París.
Su vida privada fue turbulenta y opresiva, ya que sufrió graves abusos psicológicos por parte de sus padres y su hermana, y después de su marido, treinta años mayor que ella. Además, su amante fue Aristóteles Onassis (que más tarde se casaría con Jackie Kennedy, pero continuaría persiguiendo a Callas).
Estar con la familia
“He necesitado en los últimos años estar más tiempo en casa con mi familia. Y he desarrollado una gratitud hacia el hecho de ser artista, de estar en este sector creativo”, ha dicho Jolie en la rueda de prensa del festival.
Su aparición se enmarca en un largo parón tras acaparar los titulares sobre todo por su divorcio con Brad Pitt, con quien comparte seis hijxs, y a quien acusa de haberla maltratado física y psicológicamente.
De hecho, ha apuntado a sus conexiones personales con la historia de Callas: “Hay tantas cosas que no puedo decir en esta habitación... Podéis imaginarlas. Creo que comparto con ella sobre todo su vulnerabilidad”.
Quizá esta nueva aparición en pantalla le valga volver a optar a los grandes premios del séptimo arte, a los que no se acerca desde que ganó tres Globos de Oro consecutivos, entre 1997 y 1999, y un Óscar en el 2000.
Pero lo que más le importa es no decepcionar a aquellos que amaron a Callas. Así lo ha dicho también Angelina Jolie: “No quería decepcionar a esta mujer, su memoria ni a quien la amó”. Por eso, estuvo 7 meses entrenando para cantar ópera, algo que la tuvo incluso “temblando”.
Su primera actuación fue delante de sus hijos, en un cuarto pequeño y a puerta cerrada. La última, en la Scala de Milán, uno de los teatros de ópera más importantes del mundo.