3 películas de acción que molan y que no dan vergüenza ajena

¿No te da grima el típico malote esquivabalas y rompebrazos con sus frases baratas?

El cine de acción mola pero tiene un problema: a algunas personas puede darle un poquito o un muchito de lache ver determinadas escenas en las que lxs protagonistas ponen cara de malotxs y se sienten invencibles. Todo les sale bien. Saltan de aquí para allá en mitad de las más espectaculares explosiones y salen indemnes. Luchan contra 25 enemigos y triunfan. Corren entre balas sin que ni una sola penetre en sus blandas carnes. Es tan irreal. Tan ridículo. Tan al servicio del ego del personaje de turno. Por suerte, hay algunas pelis de acción que saben reírse de sí mismas para que disfrutes de toda esa parafernalia sin sentir que te están tratando de colar una gilipollez.

El especialista

Una de las películas más divertidas de lo que va de 2024. Cine dentro de cine. Aquí también hay un personaje capaz de enfrentarse a toda clase de desafíos casi imposibles. También hay escenas magnificentes con final feliz. También hay frasecitas típicas del chulo de turno. Pero se explicita el artefacto: la directora de la película dentro de la película hace comentarios y propuestas para su obra que luego tú, en la sala del cine, ves reflejados. Es pura ironía. De hecho, la propia sinopsis lo es: un doble de riesgo que parece un súpermarine de los Estados Unidos por cómo combate. ¿Su mejor cualidad? Saber encajar los golpes una y otra vez. Cero cringe. Muchas risas.

Saga Deadpool

Es curioso que la premisa de Deadpool, el superhéroe menos arquetípicamente héroe de Marvel, sea exactamente la misma que la de Colt Seavers (Ryan Gosling) en El especialista: su mayor fortaleza es la resistencia al daño de sus enemigos y no tanto el daño que puede hacer él de primeras. La cosa es que en Deadpool esta fortaleza es llevada al siguiente nivel. ¿Le separan el torso de las piernas? La siguiente escena nos lo muestra sentado en el sofá con unas piernecitas nuevas que le están creciendo. Unas coñas que te transmiten la sensación de no estar ante el clásico machote serio y de pocas palabras que tanta grima da. Acción de la buena pero con humor.

Megalodón

Esta propuesta tiene truco. A diferencia de las dos anteriores, en la saga Megalodón no hay intentos explícitos de desmontar los códigos de las películas de acción convencionales. No nos muestran las triquiñuelas habituales para reírse de ellas. No hay parodia encubierta. No obstante, la tontería es tan sumamente gorda que es imposible que la tomes en serio y te produzca lache. Joder: estamos hablando de un tipo de unos 90 kilos que le da una patada en la cabeza a un animal de aproximadamente 103.000 kilos para alejarlo de él. Es una cinta que sin vergüenza que ni se preocupa en hacer creíble lo increíble. Se la suda la física. Es sencillamente estúpida.