Un análisis revela las marcas que más contaminan de plástico el planeta

La producción mundial de plástico aumentará un 40% durante la próxima década si las empresas continúan utilizando plástico innecesariamente para producir y embalar sus productos

Nuestro planeta ha sido invadido por el plástico. Las estimaciones indican que desde la década de 1950 los seres humanos hemos producido unas 8.300 millones de toneladas de este contaminante. De esa vasta cifra, solo hemos reciclado un 9% e incinerado un 12%. El resto, por desgracia, ha acabado en vertederos, estimaciones y otros ecosistemas naturales, alterando la vida animal pero también acumulándose en nuestros cuerpos después de inhalarlo o consumirlo indirectamente a través de la comida en forma de microplásticos. Y gran parte de la culpa la tienen las grandes e impunes multinacionales.

Para combatirlo, Break Free From Plastic Movement, impulsado por Greenpeace, Fundación Madre Tierra o GAIA in the Asia Pacific, entre otras 1.300 organizaciones miembro, acaba de publicar los resultados de una auditoría mundial llamada Break Free From Plastic Movement donde desenmascara a las marcas que más contaminación plástica generan del mundo. Para ello, más de 10.000 voluntarios han realizado un total de 239 tareas de limpieza en 42 países diferentes de los seis continentes, recolectando un total de 180.000 piezas de desechos plásticos, el 65% de ellas claramente identificadas con alguna marca de consumo.

Los análisis no dejan lugar a dudas: las tres compañías que más contaminación plástica provocan son Coca-Cola, PepsiCo y Nestlé, todas ellas muy significativas en el mercado de bebidas embotelladas PET. Juntas representan el 14% de los plásticos de marca encontrados en todo el mundo. De hecho, los desechos plásticos de Coca-Cola fueron hallados en hasta 40 países de los 42 intervenidos por los grupos de análisis. Le siguen en la lista otras empresas como Danone, Mondelez International, Procter & Gamble, Unilever, Perfetti van Melle, Mars Incorporated y Colgate-Palmolive. Y los pronósticos señalan que la producción mundial de plástico aumentará un 40% durante la próxima década.

Por eso el objetivo de este informe es, según reza el mismo, “que las corporaciones acepten la responsabilidad del impacto de sus productos y de los embalajes en los que los venden. Hacemos un llamamiento a las empresas para que utilicen materiales en sus productos que puedan ser recuperados, reutilizados y reciclados. Las empresas culpan a los consumidores por la contaminación plástica, cuando sus productos son casi imposibles de gestionar. Están muy felices de transmitir al público la responsabilidad de abordar los residuos que generan sus productos”. Pero terminar con este veneno que mata lentamente nuestro planeta es cosa de tod@s.