Las violaciones y asesinatos de mujeres en Pakistán ya no quedarán impunes

Cada año, cerca de 500 mujeres son asesinadas a manos de miembros de su familia en Pakistán. Sentenciadas a morir por haberse negado a un matrimonio de conveniencia

Imagina que por ponerle los cuernos a tu pareja o por liarte con quien no debes, pudieras terminar muerto. Y que quien te vaya a hacer pagar por ello con tu vida sea alguien de tu familia sin ir a la cárcel por ello. Pues hay lugares donde esto pasa. Cada año, cerca de 500 mujeres son asesinadas a manos de miembros de su familia en Pakistán. Sentenciadas a morir por haberse negado a un matrimonio de conveniencia, por haberse fugado con un amante o por haber sido sospechosas de una relación amorosa 'indecorosa'.

El jueves 6 de octubre, el Parlamento pakistaní aprobó dos leyes históricas que endurecen las penas contra los autores de estos 'crímenes de honor', condenándoles a pena de muerte, y de violaciones. Hasta ahora, no se contemplaba juzgar a esos asesinos si los padres de la víctima les perdonaban, según lo que se llama la 'cultura del perdón'. Ahora, aunque exista esa bendición familiar, los acusados salvarán su vida, pero pasarán a cumplir cadena perpetua.

$!Las violaciones y asesinatos de mujeres en Pakistán ya no quedarán impunes

La muerte de Qandeel Baloch en julio de este año, una joven modelo y cantante pakistaní de tan sólo 26 años, resonó por todo el mundo como ejemplo de muchas otras. Fue su hermano quien la estranguló porque estaba faltando al honor familiar con sus fotos en las redes sociales que, según él, eran muy provocativas.

Los padres de la joven estaban desolados y llenos de rabia. El padre, en declaraciones a los medios dijo que su hijo "debería ser disparado, estranguló a mi pequeña...". Habían perdido a una hija, a manos de su otro hijo y, además, también el sustento de toda la familia, de origen pobre, pues con el sueldo de Baloch vivían todos.

En esa misma sesión parlamentaria del 6 de octubre, también se aprobó otra medida histórica en relación con las violaciones. El extracto de la ley afirmaba que "en Pakistán los casos de violación son denunciados y registrados, sin embargo, el porcentaje de encarcelamiento de los acusados es abismalmente bajo". A menudo, las mujeres violadas se ven obligadas a guardar silencio, y sus padres a perdonar al agresor, precisamente para no manchar el honor familiar.

A partir de ahora, los culpables de violación se enfrentarán a 25 años de cárcel, pena capital si las víctimas son menores o discapacitadas. Además, será obligatorio realizar pruebas de ADN a ambas partes, mantener la identidad de la víctima en secreto y que la sentencia se dicte en un plazo de 90 días tras la denuncia.

La activista por los derechos humanos de la mujer en Pakistán, Farzana Bari, se mostraba satisfecha por estas medidas propuestas por el Partido del Pueblo de Pakistán PPP. Sin embargo, también avisaba de que ahora será un juez el que deberá decidir si cada caso corresponde o no a un 'crimen de honor'. Así que todo queda en manos de esa valoración, un filtro que podría dejar pasar miles de casos manchados, de nuevo, de injusticia. Se han dado pasos muy importantes, ahora sólo falta saber si se aplicarán como es debido.