Cómo ardemos por dentro en esos momentos en que un tío, sin que nadie le haya preguntado, te empieza a soltar una extensa explicación sobre un tema que ya conoces, o del que incluso sabes más que él. Con ese tono condescendiente en plan 'mujer, escucha bien porque te voy a iluminar'. Igual tienes suerte y le consigues frenar, para decirle: "sí, si lo que me estás contando ya lo sé", pero entonces te mira mal y te contesta: "¿Ah sí?". O bien el tío es un subido en general o es que tú, como mujer, tienes que ser más tonta que él por definición. Pero como somos gente civilizada, le dejas que continúe hasta que su ego haya tenido el chute que le hacía falta. Calma tus nervios porque los suecos tienen la solución.

En Suecia han dado con una manera de denunciar estos casos de lo que en inglés se denomina 'mansplaining', algo así como 'hombre explicando' o 'manera masculina de explicar'. Se trata, sobre todo, de llamar la atención sobre esta forma de machismo y crear debate social. Por eso, han abierto una línea de teléfono dedicada exclusivamente a atender a 'víctimas' de este comportamiento condescendiente por parte de los hombres en el trabajo.
La creó la Unionen, el sindicato más importante del país y que representa a cerca de 600.000 trabajadores. Detrás del teléfono hay científicos, humoristas y políticos dispuestos a ofrecer la ayuda que sea necesaria todos los días de la semana hasta las 16h.
Según explicaban desde Unionen, un estudio de la American Psychological Association asegura que los hombres "suelen sobreestimar su inteligencia muchísimo más que las mujeres" y que la "seguridad, en los hombres, aumenta con la edad". De ahí que muchas veces presupongan que saben más que nosotras y no se molesten ni en preguntar, ni se den cuenta de que lo que están haciendo es menospreciarnos y hacernos sentir menos competentes que ellos. Una manera de actuar que parece un detalle, pero que puede acabar contribuyendo a otras formas de sexismo más perjudiciales, como la diferencia en los salarios, en quien ostenta los puestos de mayor responsabilidad, etc. Algo, que como aseguran desde Unionen, "es injusto y queremos cambiarlo".
La iniciativa está recibiendo muchas críticas, les acusan de polarizar a la población y de ser sexistas contra los hombres. Ellos responden que "hay un problema estructural construido sobre el concepto de mansplaining que no puede ser ignorado. El sindicato comparte el análisis de que el mansplaining suele darse más en los hombres y creemos que es importante hablar sobre este problema con la intención de analizarlo y promover el cambio".
Debate ya está creando, habrá que ver si eso acaba revirtiendo en un beneficio para la sociedad o si se evapora en unos días, sepultado por unos cuantos centenares de comentarios en las redes sociales.