En el año 1988 la psicología descubrió algo muy importante: la percepción de autocompetencia resulta más importante aún que la propia autocompetencia a la hora de tener éxito en una tarea o en un proyecto. Partiendo de esta premisa, la psicóloga Carol Dweck, de la Universidad de Stanford, estableció dos actitudes diferentes ante esas tareas. Por un lado, la mentalidad fija, "la idea de que tus habilidades son altas o bajas y no hay mucho que puedas hacer para cambiarlo", explica la también psicóloga Elaine Elliott-Moskwa en la tareas. Por otro lado, la mentalidad de crecimiento, "la visión de que tus habilidades son maleables" en el tiempo y de que tienes margen de evolución si te lo propones.
Eres capaz de hacerlo
Ambas actitudes conviven en ti. Sin embargo, y como apuntan desde este mismo medio, "los momentos de dificultad estimulan una mentalidad fija" en ti. En esas situaciones duras, complicadas, confusas, desafiantes, tiendes a pensar que tienes las habilidades que tienes y que no hay nada más que puedas hacer al respecto. Lo cual es mentira. Obviamente. Todos esos mensajes de "no soy lo suficientemente buenx", "soy incapaz de hacer eso" o "yo estoy hecho para otras cosas" son pura basura mental. La realidad es que tus capacidades no son así de fábrica necesariamente. Las puedes mejorar. Las puedes redireccionar. Solo necesitas mantener activa la mentalidad de crecimiento para ello.
Aunque no es sencillo. "Esta mentalidad de 'puedo hacerlo' puede ser más difícil de conquistar de lo que parece. Lograrla significa sentirse cómodo aceptando obstáculos, aprendiendo de las críticas y persistiendo cuando las cosas se ponen difíciles". Tienes que practicar un profundo compromiso con este enfoque vital. Con tus objetivos. Con tus competencias. Con tu autoestima. Tienes que repetirte a ti mismx que eres capaz de adaptarte. Que no estás determinado por tu programación. Incluso aunque afloren las sensaciones de inseguridad, ansiedad y miedo. En palabras de la propia Elliott-Moskwa, "estamos programados para creer en nuestras emociones". Así que desafíalas en serio.
Hazlo y disfrutarás de una vida más plena. Una en la que no te sientas insuficiente en ningún momento. Una en la que afrontes cada meta como un camino para el que solo necesitas dedicación. Según la BBC, las personas "con una mentalidad de crecimiento pueden aprovechar un conjunto de habilidades útiles para manejar el estrés, construir relaciones de apoyo con los colegas, hacer frente a los fracasos y desarrollar atributos para ayudarlos a avanzar en sus carreras". Y, por encima de todo, percibir las críticas como una oportunidad de crecer y no como un hachazo a su amor propio. Caminarás por este mundo con un sentimiento nuevo de desarrollo. De capacidad sin límite. De posibilidades.