Las películas de terror convierten a los psiquiatras en mejores profesionales

Lxs buenxs directorxs del horror audiovisual contribuyen a la salud mental de la sociedad

Las obras audiovisuales de terror están ideadas para intentar producir ansiedad. Para quienes disfrutan de esa sensación, de la tensión, del horror, son una experiencia maravillosa. Para quienes no, pueden ser verdaderamente estresantes. Sin embargo, y según la práctica educativa del profesor de psiquiatría Anthony Tobia, del Hospital Universitario Robert Wood Johnson de Rutgers, Estados Unidos, incluso los estudiantes de psiquiatría que detestan las series de terror pueden beneficiarse de su visionado: les ayuda a convertirse en mejores expertxs psiquiátricxs.

Diagnósticos más precisos

Y lo hace de múltiples formas. En primer lugar, explica este especialista en Inverse, las películas y las series de terror dan la posibilidad a lxs alumnxs de medicina de diagnosticar a lxs protagonistas de las mismas. Después de todo, y en palabras del propio Tobia, "cualquier representación del comportamiento humano puede ayudar a enseñar los aspectos típicos y atípicos de la salud psiquiátrica". Y aún más la representación terrorífica, en la cual abundan los trastornos mentales, ya sean explicitados o transformados en una metáfora a veces difícil de descifrar.

Cloverfield, conocida en nuestro país como Monstruoso, es un buen ejemplo de representación metafórica. Según Tobia, "este monstruo extraterrestre es un bebé que está haciendo todo lo posible para encontrar a su madre". Una conclusión extraída durante los debates que realiza con sus estudiantes al finalizar los visionados. De ese modo, dice, sus alumnxs pueden relacionarse con los signos habituales de una enfermedad llamada trastorno de ansiedad por separación. Estudiarla. Entenderla. Y así para cada una de las películas o de los episodios que ven todxs juntos.

Acercamiento sin prejuicios

En segundo lugar, la identificación de trastornos psicológicos en los personajes del terror audiovisual también ayuda a lxs futurxs psiquiatras a superar sus prejuicios. Porque tienen que comprender a algunas criaturas que a menudo son criaturas espeluznantes. Incluso peligrosas. Y eso, según indican desde ese mismo medio, "ayuda a lxs estudiantes a superar los estigmas que se les impone a las personas con trastornos psiquiátricos, quienes en muchas ocasiones se consideran monstruos" por el conjunto de la sociedad. Aprenden a no juzgar. Aprenden a empatizar con todxs.

Mayor autoconocimiento

Y en tercer lugar y último lugar, el visionado de estas obras hace que lxs psiquiatras sean mejores psiquiatras porque aprenden a conocer en mayor profundidad. "Hay algunas cosas que pueden haberse infiltrado en tu conciencia y que tu cerebro esté reprimiendo por una buena razón, pero este es un espacio seguro para explorarlas, para ver un aspecto reprimido de ti mismx, de tu subconsciente, literalmente proyectado en una pantalla". A fin de cuentas, desarrollar el autoconocimiento resulta clave para entender los sesgos propios y llegar a comprender a los demás.