La peligrosa tendencia a “romantizar tu vida”: así pueden afectarnos estos vídeos aspiracionales

Abres TikTok y encuentras un vídeo de una selva. Abres Instagram y alguien pasea por una playa o se toma un té matcha mientras se prepara para ir al trabajo a las 6 am. Sigues haciendo scroll y el contenido no varía: vidas semi perfectas intercaladas con alguna noticia de última hora. Sin embargo, hay una tendencia diferente al postureo habitual. Se trata de romantizar tu vida. Romantizar, sí. Has leído bien. Una tendencia que arrasa en TikTok con vídeos aspiracionales acerca de cómo deberías disfrutar del presente. Da igual si estás en paro o si tienes que salir de casa a las siete de la mañana y coger dos autobuses para llegar al trabajo, esta tendencia presupone que, si romantizas ese trayecto, igual eres más feliz. O igual no. Veamos por qué.

Para que nos entendamos, este tipo de vídeos se caracterizan por darle un carácter romántico a casi todo lo que hacemos en nuestro día a día. Y cuando decimos todo, nos referimos a cosas tan cotidianas como hacerte el desayuno o fregar los platos.

”Se trata de ser positivo sobre las cosas que ofrece la vida, no importa que la circunstancia sea la que te imaginaste o no”, cuenta Ashley Ward, de 26 años, en este video en TikTok que ya se ha visto más de tres millones de veces. El clip es de 2020, pero siguen apareciendo más vídeos del estilo, con frases aspiracionales como las que popularizó Ward: “No puedes controlar todo en tu vida, pero sí puedes controlar cómo ves tu situación”, dice la joven. Y nosotrxs nos preguntamos, ¿seguro? ¿Cómo nos afecta eso de tener que ser el “protagonista” de nuestra propia historia?”

“Pensar en positivo no está mal, puede ayudarte, pero también tienes que tener presente que las cosas te pueden ir mal en algún momento y que no todo depende de ti”, explica Aurora Gómez Delgado, psicóloga experta en comportamientos digitales en Corio.

Para algunas creadoras de contenido como @albazamoraexpo, “cada abrazo importa, cada desayuno rico importa, cuando te pones ese outfit que tanto te gusta y te ves guapa... Eso es tomar tu vida como si fueras tú la protagonista de tu propia historia” y continúa, “todo eso es apasionante, depende de cómo lo mires”.

Pero hay más. La red social de la gen Z está llena de vídeos en los que se aconseja sacar fotos a cosas bonitas y subirlo a redes, pero con el objetivo de que no te compares: ”Intentad conseguir que vuestras redes sociales sean un espacio que os inspire, que aprendáis y os sintáis validados, no como un espacio de comparación continua y donde os sintáis mal con vuestra vida y con lo que os rodea”, aconseja Aloma Bye, estudiante de Comunicación Audiovisual en este vídeo de YouTube titulado ‘La guía definitiva para romantizar tu vida’.

Si seguimos viendo este tipo de contenidos, en todos encontramos el mismo patrón: gente diciéndote cómo vivir tu vida bajo el concepto de un viejo conocido, el mindfulness. Es decir, vivir el presente y centrarte en lo que tienes sin pensar en nada más. Pero, ¿acaso esto se puede trasladar a todas las facetas de tu vida? ¿Qué ocurre si a pesar de romantizar tu rutina sigues sin trabajo? Si estás atravesando un duelo, ¿sirven para algo este tipo de consejos?

“Este tipo de psicología positiva tiene mucha paja y muy poca validez científica”, nos cuenta Aurora Gómez. “Lo que esta gente hace es coger los principios de la psicología positiva para dar soluciones baratas y rápidas”, añade la psicóloga. Pero no, no son el tipo de consejos que te ayudan a superar una crisis de ansiedad. “Todo el tema de la atención plena está bien porque te ayuda a centrarte en una tarea, pero es solo una estrategia dentro de las cincuenta que puedes utilizar”.

Por ejemplo, tal y como nos cuenta esta experta, lo ideal sería dedicar otra parte del tiempo al problema que realmente te preocupa. “La ansiedad no es mala, sirve para algo. Es cierto que a lo mejor no tenemos las suficientes herramientas para calmarla, pero aparece porque hay una amenaza, y romantizar tu vida no es la solución. Más bien funciona como una técnica de evasión”, explica la experta en comportamiento digital.

No es casualidad que este tipo de contenidos vinculados a la psicología positiva hayan resurgido ahora, en plena crisis económica, nos explica Aurora: “Ya pasó con la crisis de austeridad de 2008. Los millenial se incorporaban al mercado laboral y no encontraban trabajo. Entonces llegó esa tendencia a pensar que todo era culpa nuestra, y que teniendo un pensamiento positivo podías cambiar tu realidad”. Es lo que decían los medios y los libros de autoayuda. Ahora el mensaje llega desde reses sociales como TikTok e Instagram, que son puramente visuales.

“En estas redes todo es imagen. Además, hay mucha referencia a la identidad aspiracional que debes tener, hay una idealización extrema de la felicidad”, comenta Gómez.

En TikTok aparecen vídeos de casas que no podrás comprar, gente que madruga para ir al gimnasio o incluso chicas que te dan consejos sobre cómo romantizar tu estudio. De esta manera, “crean una imagen distorsionada de lo que es el día a día de alguien”. El colmo se lo llevan quienes romantizan estar en paro.

“Todo esto tiene sus consecuencias. Por ejemplo, un narcisismo que puede llegar a ser patológico, una individualización extrema en la que no hay espacio para pensar en lo colectivo...”, afirma la psicóloga. Además, “hay riesgos de caer en frustraciones por no tener esa vida que proyectan otros. Tú intentas algo y no lo consigues. Con este tipo de psicología positiva, lo primero que piensa mucha gente es no puedo, es culpa mía. Pero esto no es así. Si fuéramos capaces de ver el sufrimiento como algo colectivo y no individual, podríamos ir mucho más allá”.

Para este tipo de situaciones, lo que nos aconseja Aurora Gómez es saber “separar lo espiritual, el pensamiento mágico, del mundo real”. Es decir, intentar “deconstruir nuestra mirada”. Pero, sobre todo, ser muy conscientes de que, “teniendo un pensamiento positivo no puedes cambiar tu realidad. Esta idea puede ayudarte en determinados momentos, pero no lo es todo”, comenta.

¿Acaso poner velas nos ayuda a evitar un despido masivo en nuestra empresa? ¿Rezar? ¿Tener un amuleto de la suerte? Desde el principio de los tiempos, “los seres humanos hemos necesitado controlar nuestras vidas”. Sobre todo en situaciones de incertidumbre, como la que ahora estamos viviendo, con varias crisis por la espalda. “Esto te da la falsa sensación de que con tu mente puedes controlar el mundo exterior. Pero, en realidad, solo te evade. Te quita tiempo para resolver el problema”.