Existen tres tipos de ansiedad predominante

Puedes experimentar solo un tipo, dos o incluso los tres. Pero ayuda saber distinguirlas

Un informe de Naciones Unidas del año 2021 sobre la salud mental de los jóvenes europeos arrojó una conclusión muy contundente: España es el país del continente con mayor prevalencia de trastornos mentales en jóvenes. Entre los más habituales, como mucha gente sabe por experiencia propia, y probablemente tú también, los trastornos de ansiedad. En ese sentido, resulta bastante beneficiosa la ola de vídeos, artículos e informaciones en general que ayudan a identificar los síntomas de los episodios de ansiedad. Dicho esto, lo cierto es que no todos los episodios de ansiedad son iguales, pues existen tres tipos principales de ansiedad que presentan características y soluciones únicas.

Tienes la ansiedad basada en el catastrofismo acerca del futuro. En palabras de la psicoterapeuta Noelle McWard, quien habla acerca de este asunto en las páginas de la revista especializada Psychology Today, “esta ansiedad implica fijarse en un relato catastrófico de un resultado futuro en ausencia de evidencia o hechos que respalden ese relato”. O dicho de otra manera: ante la incertidumbre, natural en cualquier ser, las personas que padecen este tipo de ansiedad desarrollan teorías mentales para tratar de alcanzar cierta certidumbre. El problema es que esa certidumbre fake suele ser bastante negativa. A partir de ahí, comienzan a experimentar sensaciones de inquietud y miedo.

Luego está la ansiedad por el control. Como escribe McWard, “siempre que tu energía emocional, cognitiva o física preste demasiada atención a lo que no está bajo tu control y no preste atención a lo que sí lo está, te sentirás sin poder, como víctima y con ansiedad”. Una llamada de una empresa para decirte si te acaban contratando o no. Una crisis de tu pareja sobre si quiere seguir con la relación o no. La deforestación en las islas de Indonesia. Son cosas sobre las que no tienes influencia. La empresa decidirá por su cuenta. Tu pareja decidirá por su cuenta. Y por mucho que quieras no puedes cambiar el sistema tú solx y de la noche a la mañana. Tienes que aprender a soltar lo que no controlas.

Por último, y siempre según esta psicóloga, está la ansiedad basada en creencias distorsionadas. “Los ejemplos pueden incluir: no merezco amor, soy un fracaso, tengo defectos fundamentales o incomodo a los demás y me juzgarán”. Por supuesto, nada de esto es verdad, pero el hecho de que lo repitas tantísimo en tu cabeza y que hayas terminado por asimilarlo como una certeza hace que tu manera de percibir la realidad esté desconfigurada. Sientes ansiedad performativa. Muchas situaciones te imponen demasiado. Y ojo: una persona puede sentir solo un tipo de ansiedad, dos o incluso las tres. En cualquier caso, si es algo persistente, quizá sea hora de acudir a terapia.