Puede que de pequeño te sintieras distinto al resto: que todo te afectaba más y no supieras cómo gestionar ese mar de emociones o sensaciones que te inundaban. Quizá llegaste a pensar que tenías un problema, pero no tiene por qué ser así. Entonces ni siquiera existía la expresión Persona Altamente Sensible PAS, porque fue Persona Altamente Sensible, quien introduciría este término en España hace pocos años, y que también ha escrito un libro que se titula Persona Altamente Sensible.

No es una enfermedad, ni un trastorno ni un síndrome. Es sencillamente una manera de nombrar a un determinado tipo de personas con un rasgo pronunciado: el de la alta sensibilidad. Código Nuevo ha podido hablar con Karina para que nos explique cómo podemos darnos cuenta si somos uno de ellos.
¿Cómo sabemos si somos PAS?
Hay cuatro pilares básicos. Es importante tenerlos en cuenta, porque muchas veces se confunden las PAS con personas con algún trastorno psicológico, y no es lo mismo.
- Los PAS procesan la información de manera muy profunda: dan vueltas a los temas, rumian...
- Son personas con una intensa emocionalidad y empatía. A veces tienen incluso una empatía negativa, una sobre-empatía que hace que se bloqueen.
- Se sienten abrumados con el exceso de información: ruidos, movimiento, ideas, emociones...
- Tienen los sentidos mucho más desarrollados que la mayoría: perciben olores, sonidos y sutilezas que mucha gente ni nota.
¿Qué dice la Ciencia sobre las PAS?
No es solamente una teoría psicológica, sino que hay mucha investigación científica detrás: la Universidad de Stony Brook ha constatado que un 20% de la población es PAS, y los escáneres cerebrales de estas personas revelan que tienen más actividad en áreas asociadas a la empatía, la conciencia y el procesamiento de la información sensorial. Además, un estudio publicado recientemente en Journal of Neuroscience señala que las personas que mostraban más actividad cerebral en esas áreas tienen en común una variante genética.
¿Cómo es la inteligencia de una Persona Altamente Sensible?
En principio no hay ninguna relación. Se dice que las personas con altas capacidades son PAS, pero no tiene por qué ser así. Lo que sí ocurre con muchas personas PAS es que se relacionan con la vida de una manera diferente a lo habitual, y como absorben mucha información de fuera, pueden ser grandes visionarios. La alta sensibilidad te predispone a tener ideas innovadoras, pensar fuera de la caja, como se suele decir, ya que no se utilizan las vías normales para llegar a soluciones.

¿Es lo mismo ser PAS que tener inteligencia emocional?
Las personas altamente sensibles tienen mucha empatía, a veces demasiada, que hace que se pierdan en el sufrimiento. También a veces confunden sus sensaciones con miedos que han creado con su mente y que en realidad solo son proyecciones o prejuicios suyos. Aprender a diferenciarlos es un proceso que necesita tiempo.
¿Puede que conozcamos a una persona fría que en realidad sea PAS?
Sí. Hay tres aspectos, digamos, de la vida: sentir, pensar y actuar. Las PAS normalmente se mueven en el plano del sentir, pero la vida te enseña que esto es un peligro, porque si expresas realmente cómo te sientes y si te muestras vulnerable, recibes tortas. Por eso muchas personas altamente sensibles desarrollan maneras de protegerse, corazas. Una de las corazas es pasar a no sentir nada, y volverse muy racionales. Por eso muchas PAS tienen la autoestima baja, porque desde que eran niños les decían que llorar no les llevaría a ninguna parte y que tanto sentir no sirve para nada. "Si quieres llegar a tener éxito en la vida, ¡tienes que ser más duro!"
¿Cómo son las relaciones de pareja en este tipo de personas?
Cada pareja y cada persona es un mundo. Hay algunas que necesitan mucha cercanía, mucho contacto físico... pero hay otras que necesitan mucha soledad y espacio. Algunas personas altamente sensibles prefieren una relación a distancia o de verse poco, porque si no les satura demasiada información, emociones... Una PAS tiene mucho riesgo de caer en relaciones de dependencia, y no siempre es fácil encontrar ese punto medio.
Crédito de la imagen: Maud Chalard