El hombre de la foto que encabeza este artículo es Fred Olsen. Noruego, de 86 años, empresario siempre hambriento y dueño de una de las mayores fortunas de país. Un rumor que circula desde hace tiempo por Internet dice que Matt Groening, creador de Los Simpson, se inspiró en él para dar forma al temible y avaricioso señor Burns. Y, de hecho, si nos quedamos con la primera impresión, a nadie le chocaría que este rumor fuera cierto. Octogenario multimillonario, de aspecto estirado y, según dicen, agresivo hombre de negocios.
Pero nada más lejos de la realidad. En primer lugar, Groening ha desmentido que exista ningún tipo de relación entre Olsen y el despreciable Burns es decir, que cualquier parecido es pura coincidencia. Y en segundo lugar, basta con repasar muy por encima la apasionante biografía de Olsen para comprobar que él y el horrendo dueño de la central nuclear de Springfield son la noche y el día.
Fred Olsen tuvo desde joven la oportunidad de llevar una vida a todo confort, rigiendo el negocio familiar que había fundado su bisabuelo, un imperio económico basado en los envíos de mercaderías a través del mar. Igual que a su padre, el destino de Olsen le marcaba que iría a la universidad, cursaría los estudios correspondientes y, a pesar de no haber pisado jamás un barco, dirigiría la empresa desde la comodidad de un despacho.
Pero Olsen pasó de su destino y tiró por libre. A los 20 años se embarcó en el Bruno, un navío a bordo del cual recorrió todo el mundo. Estuvo más de dos años curtiéndose como marinero, realizando los trabajos más humildes que se puedan imaginar. Sin duda, aprendió un montón de cosas sobre la vida real que ninguna universidad le hubiera podido dar. “Mi falta de una educación formal es una ventaja extraordinaria", dice Olsen. "Nunca me he dejado condicionar por limitaciones académicas”.
Igual que otros emprendedores de fama mundial, como Bill Gates o Steve Jobs, Olsen decidió confiar más en su intuición que en los estudios universitarios. Y fue así precisamente, guiado por su intuición, que a finales de los años 60 dirigió una expedición a los Mares del Norte, en Noruega, convencido de que allí encontrarían un gran yacimiento de petróleo.
Efectivamente, Olsen no iba errado: encontró uno de los mayores yacimientos de petróleo del mundo, el Ekofisk, con lo que consiguió aumentar suculosamente su ya gran imperio económico.
Pero quizás estés pensando que alguien que se dedica al negocio del petróleo no es tan distinto del señor Burns. Sin embargo, nuevamente Fred Olsen nos demuestra que en nada se parece al jefe de Homer Simpson. En los años 90, invirtió buena parte de su fortuna en energía eólica. Tanto es así que en la actualidad Fred Olsen Group es la primera empresa proveedora de energía eólica en Gran Bretaña, y una de las principales de energía marina en toda Europa.
Y es que una de las mayores preocupaciones de Fred Olsen es el cambio climático y los efectos devastadores que está teniendo en el planeta. De hecho, a pesar de no ser muy dado a las entrevistas y salvaguardar hasta el extremo su vida privada, Olsen sí que se ha implicado a fondo para combatir el calentamiento global, siempre haciendo campaña a favor de las energías renovables. ¿Haría acaso el señor Burns algo así?
Hoy en día, el conglomerado empresarial de Fred Olsen genera más de 2.500 millones de dólares al año. Sí, tiene mucho dinero y cierto parecido físico al señor Burns, de acuerdo, pero Olsen puede enseñarte un montón de lecciones sobre cómo triunfar y hacer dinero, pero también sobre cómo vivir tu vida según tus reglas. Y hasta sobre cómo luchar por el medio ambiente.
Créditos de la imagen: reddit.com