Qué duda cabe de que vivimos en un mundo global e interrelacionado, en el que cada acontecimiento puede llegar a tener repercusiones a miles de kilómetros. Poca gente sabe que el movimiento Occupy empezó en Nueva York con una manifestación en solidaridad con el movimiento 15-M en Washington Square el día 21 de mayo de 2011, y mucho menos que fueron un grupo de españoles, junto a otros activistas extranjeros, los que importaron tácticas y experiencias de movimientos sociales recientes en otros países y propusieron el eslogan que sería capaz de movilizar a miles de personas en todo el mundo: #Wearethe99% Somos el 99%.
Según el investigador social Jeff Lawrence, que ha publicado un interesante trabajo sobre la gran influencia del 15 M en el movimiento Occupy, cuando Begoña Santa Cecilia y Luis Moreno-Caballud, dos españoles que habían participado en el 15-M, se unieron al movimiento Occupy Wall Street les sorprendió descubrir que el campamento que se había montado en el corazón de Wall Street no tenía nada que ver con las acampadas que habían visto en España ese mismo año: espacios hospitalarios y abiertos en plazas públicas en las que se congregaban grupos diversos de gente.
Sin embargo, las cosas en Nueva York no eran así. En el parque se respiraba un clima de violencia muy alto: rodeados de furgonetas de policía, los escasos manifestantes gritaban a los agentes y a los curiosos que pasaban por allí. Los dos activistas españoles decidieron proponer un cambio de táctica enviando un email al grupo de trabajo de Extensión, que se ocupaba de comunicar el mensaje de Occupy al exterior.
En el mail aseguraban que para que funcionara el movimiento Occupy tenía que convertirse en un movimiento inclusivo y que era muy importante dejar claro que no era una protesta más contra el sistema, sino que querían crear un espacio para que los ciudadanos discutieran, hablasen y pudieran proponer soluciones y alternativas para un mundo en crisis. Y así fue como propusieron revitalizar un eslogan que había sido formulado a través de un proceso colectivo en los días previos a la ocupación: 'Somos el 99%'.
A los pocos días se empezaron a imprimir flyers y para el fin de semana la campaña estaba en marcha y #WeAreThe99% era trending topic en Twitter. En dos semanas, aparecieron acampadas en más de cincuenta ciudades norteamericanas. Se coreaba 'Somos el 99%' en todo el país, y después en todo el mundo. El movimiento del 99% se había hecho global.
El movimiento Occupy se hace global
Ni dos meses le hicieron falta al movimiento Occupy Wall Street para conseguir extenderse cual virus por 915 ciudades de 82 países diferentes y a más de 600 ciudades de USA. Y no han pasado ni tres años desde las primeras concentraciones y ya se pueden encontrar campamentos en todos los continentes.
El más potente de los últimos meses ha sido su desembarco en Hong Kong, China. El 22 de septiembre los estudiantes de Hong Kong iniciaron una huelga de cinco días sin precedentes y salieron a las calles, en las que permanecen desde entonces armados con sus ya famosos paraguas bajo la atenta mirada de la policía.
Cada vez son más los ciudadanos que se han unido a las protestas para exigir la dimisión del actual Jefe del Ejecutivo de Hong Kong, Leung Chun-ying, y la instauración de una democracia real. Leung, con el apoyo del Gobierno chino, ha anunciado que no renunciará a su cargo y se opone a lo que considera "protestas ilegales", aunque ha ofrecido a cambio del fin de las protestas la creación de un mecanismo de negociaciones con participación popular para debatir reformas políticas posteriores a las elecciones locales de 2017, pero los activistas chinos lo consideran insuficiente y están dispuestos a permanecer en la calle hasta que el Gobierno cambie su política y cumpla los acuerdos prometidos con anterioridad.
Crédito de la imagen: Esther Lee Flirk