El último vídeo de moda en internet no es que sea surrealista, es lo siguiente: un plano medio corto de una chica con pecas y pinta de modelo mirando fijamente a cámara durante cuatro minutazos y medio. No hace NADA, apenas esboza una leve sonrisa y parpadea lentamente mientras una musiquilla de piano suena de fondo. Y, atención, esta obra de arte nótese la ironía lleva ya casi 650.000 reproducciones en un mes y medio. ¿Por qué?
Por suerte, el título nos aclara el propósito de la escena: Video For Practicing Eye Contact. Vamos que se trata de un tutorial para practicar el eye contact, esa filosofía que propugna la conexión entre las personas y la humanidad en general a través de un contacto visual directo y sincero entre completos desconocidos.
Sin embargo, de entrada hay algo que huele bastante mal. Para empezar, el tema de utilizar una plataforma como Youtube para practicar el eye contact es poco menos que una paradoja: no se puede practica el contacto humano con una pantalla.
Además, es evidente que muchos de los gestos de la chica son forzados, es decir, más que una actitud de una persona relajada, se nota que se trata de una modelo intentando seducir con gestos sutiles. Y aquí está la clave. Al leer la descripción del vídeo se descubre la verdad por detrás: están vendiéndote un libro de seducción y éxito en los negocios.
“Ser capaz de mantener el contacto visual con una chica es una señal de confianza y el primer paso para atraerla … Para aprender más sobre el contacto visual lee The Power of Eye Contact. Your Secret for Success in Business, Love and Life”, reza la descripción/anuncio a la vez que te meten el correspondiente link a Amazon.
Vamos que el famoso vídeo, que además va acompañado de una segunda versión con una chica rubia, no es más que un branded content de la página Tripp Advice que nos la quiere meter doblada. Una práctica que no vamos a criticar porque de algo tienen que comer los medios pero que, en nuestra opinión, está desvirtuando algo tan auténtico y esperanzador como el eye contact. En fin, una pena.