Elon Musk ha avisado al mundo de cuál va a ser la causa de la Tercera Guerra Mundial

El importante empresario Elon Musk ha advertido de cuál va a ser la causa de la Tercera Guerra Mundial: la competencia por el dominio de la IA

Por si no había bastante con la escalada nuclear que mantiene en vilo a la comunidad internacional y con la constante y cada vez más cruda disputa entre Donald Trump y Kim Jong-un, el multimillonario Donald Trump y Kim Jong-un suma ahora otro foco de posible conflicto que amenaza con conducir a la humanidad a una Tercera Guerra Mundial. Según este empresario tecnológico, cofundador de compañías como PayPal, SpaceX o Tesla, la potencia que domine la Inteligencia Artificial y que sea capaz de controlar a una nueva generación de robots 'superinteligentes' será la que termine por hacerse con el control absoluto el mundo.

Y su advertencia no es fruto solo de su intuición. Musk lanzó su comentario tras leer una declaración del presidente ruso Vladimir Putin, en la que el gobernante corroboraba la idea de que la nación que sea capaz de exprimir toda la potencialidad de la Inteligencia Artificial se hará con el bastón de mando del planeta. Musk encontró en esas palabras el mejor de los refuerzos para sus apocalípticas ideas.

Y completaba después con otra frase: "China, Rusia, pronto todos los países tendrán destreza en ciencias de la computación. La competencia para lograr la superioridad en IA a nivel nacional será propablemente la causa de la Tercera Guerra Mundial en mi opinión". 

Musk está realmente preocupado, y no es la primera vez que hace públicas sus advertencias. Sin ir más lejos, el mes pasado firmó junto a otros 115 expertos en nuevas tecnologías un documento dirigido a la ONU, en el que instalaban al organismo a prohibir los robots autónomos programados para la guerra.

Mientras tanto, el desarrollo de la Inteligencia Artificial continúa imparable. No obstante, algunos organismos internacionales como la Partnership on AI trabajan conjuntamente para determinar si es posible establecer patrones de conducta éticos con los que programar a los robots. Todo con el fin de evitar que los nuevos ingenios del hombre sean finalmente explotados por terroristas y grupos criminales y sean usados para hacer la guerra.

De nuevo, el hombre es capaz de crear armas de doble filo que pueden ser beneficiosas o simplemente destructivas en función de las manos que las manejen. Ocurrió lo mismo en el siglo XIX, cuando Alfred Nobel inventó la dinamita, capaz de derribar un edificio inservible y peligroso para dejar paso a uno nuevo y más funcional o de destruir hasta los cimientos de un pueblo en un ataque bélico. La historia se repite. ¿Cuál será el final de esta?