La compañía de productos para el cuidado corporal Dove ha recibido durante los tres últimos días una avalancha de críticas por su último anuncio considerado racista. En él, al quitarse la camiseta, su jabón 'convierte' a una mujer negra en una blanca y, después, a la blanca en una asiática. Y aunque, según ha dicho la marca en un comunicado de disculpas, pretendían representar la belleza de todas las razas, desde luego la han cagado. Y mucho.
El anuncio se hizo viral la semana pasada, después de que la maquilladora profesional y blogger estadounidense, Naomi Leann Blake, compartiera un pantallazo de la imagen en Facebook y pidiera explicaciones a la marca. De hecho, a pesar de que Dove se disculpara por el 'malentendido' tanto en Twitter como en Facebook, el post de Blake ya se ha compartido más de 10.000 veces en esta red social.
“Dove está comprometida a representar la belleza de la diversidad. En una imagen que publicamos esta semana, nuestra intención de representar a mujeres de color de manera original no fue reflejada en la publicidad. Nos arrepentimos profundamente el daño que ha causado. Hemos escuchado los comentarios y los utilizaremos como guía para nuestras decisiones en el futuro”, decía el comunicado de Dove.
Sin embargo, desde el viernes sus redes sociales se han llenado de comentarios y reclamaciones de personas ofendidas por el racismo que se puede comprender del anuncio que fue inmediatamente eliminado de todas las plataformas. Muchas de ellas aseguraban que no volverían a comprar productos de la marca.

Y es que, aunque esta empresa sea conocida por su buen rollo respecto a la diversidad de cuerpos, no es la primera vez que Dove se mete en líos por racismo. En 2015, la marca se puso a mucha gente en contra por una crema solar en la que ponía que podía ser usada "desde en pieles normales hasta en pieles oscuras". Por otro lado, en 2011 también lanzaron un anuncio en el que aparecían tres mujeres de diferentes razas frente a una pared en la que colgaban imágenes de antes y después de utilizar el producto. En fin, que les vendrían bien unos nuevos publicistas.