China implanta un sistema de vigilancia mental para controlar a sus funcionarios

Miles de trabajadores en China son vigilados con sensores ocultos que detectan sus cambios emocionales

La evolución tecnológica está que no para. Black Mirror nos viene presentando realidades futuras que, en ocasiones, son temerosas y hasta terribles. Cuando uno ve la serie una sensación de lejanía lo acompaña, algo así como “eso nunca pasará, sería una locura”. Pero, como ya sabemos, algunas de las historias que relata esta serie de Netflix han cobrado vida en China y, en esta ocasión, la realidad se ha adelantado a la ficción.

El periódico asiático South China Morning Post informa que el gobierno ha implantado un sistema de vigilancia sobre los conductores de trenes de alta velocidad, los militares y los empleados de cadenas amplias de producción. Monitoreando las ondas cerebrales los altos mandos controlan los cambios emocionales de estos trabajadores; la lectura pasa a unos ordenadores que se encargan de medir los datos recogidos a través de algoritmos de inteligencia artificial que sacan a la luz emociones como la ira, la depresión o la ansiedad.

Los sensores son livianos, inalámbricos y están ocultos en prendas corrientes que los trabajadores llevan en su rutina: cascos de seguridad o sombreros de uniformes. Recogiendo la información, el Gobierno chino defiende que es posible aumentar la competitividad de su industria manufacturera, el ritmo de trabajo y la estabilidad social, algo así como “fabricar” operarios más eficientes en todos los sentidos. El programa de vigilancia emocional se está poniendo de moda y varias empresas lo están implantando, de hecho, en algunas de ellas los trabajadores llevan auriculares que los insertan en realidades virtuales y los ponen a prueba.

El método es todo un éxito, así lo explican varios gerentes que, además, aseguran que las equivocaciones en el trabajo han disminuido enormemente. Cuando se enciende la alarma, es decir, cuando el programa de vigilancia detecta a algún operario con emociones inestables se le recomienda que se tome un día libre o aumente su nivel de concentración. Ojalá la tecnología de la vigilancia más extrema formase parte de la nueva temporada de Black Mirror, el problema es que parece que, al menos en China, es una realidad que solo está comenzando.