A los de Bayern se les ha ido de las manos con el último anuncio de la famosa y ya inmortal Aspirina, y ahora están con un dolor de cabeza que ni tres ibuprofenos consiguen curárselo. Lo que no sabían es que las redes sociales se iban a incendiar con su brillante idea. Y es que no se les ocurrió otra cosa que crear tres carteles que comparan publicar vídeos sexuales sin consentimiento con una cefalea.

"Tranquilo, no es que lo esté grabando.mp3"

"Está bien, no estoy anotando nada.doc"
Creatividad al poder. Aspirina no podía estar más orgullosa de su campaña, que fue incluso premiada en el Festival de Publicidad de Cannes Lions 2016. Pero la alegría se truncó con la reacción de los consumidores en internet. A muchos usuarios en la red no les hizo ni pizca de gracia que se banalizara algo tan serio. No han tardado en lloverle críticas al anuncio por machista y sexista. El revuelo ha sido tanto, que la compañía se ha visto obligada a pedir perdón públicamente.
El desgraciado Tweet de Crunch

La marca dijo primero que había sido una “mala broma” WTF? y se disculpó por el tweet, pero horas más tarde cambió de versión y dijo que su cuenta había sido“vulnerada”.
La poca clase de Ford
Chocolates aparte, Ford también metió la gamba hasta el fondo con el anuncio de su Figo. Aprovechando que estaba dedicado a la generación milenial y bajo el eslogan "deja tus preocupaciones detrás", no lo pensaron dos veces antes de imprimir carteles en los que aparecían tres mujeres de pechos enormes y ropa apretada y sexy en el maletero con manos y pies atados, mientras un hombre de enorme parecido a Berlusconi guiñaba el ojo al público. Ya lo dicen: una imagen vale más que mil palabras, con el agravante de que el ex primer ministro italiano fue condenado por prostitución de menores.

Los otros dos carteles tampoco se quedaron cortos: Paris Hilton de pilota y las Kardashian amordazas en uno y Michael Schumacher secuestrando a Sebastian Vettel, Fernando Alonso y Lewis Hamilton.
O sea, Loewe
Si Loewe cree que la juventud española es como la que aparece en su vídeo, quizás debería ir al oculista. En 2012 lanzó un vídeo para promocionar su nueva colección y el resultado no fue exactamente como esperaba. Dio que hablar, eso sí, pero no por los bolsos, sino por los niños de papá que protagonizaron la campaña y las pavadas que salían de sus bocas. Frases tan elaboradas como “estar enamorada es lo más” o “lo más guay de España son las españolas”.
La belleza según Bodybell
Ahora, el gordo de la superficialidad se lo lleva, sin duda, la cadena de perfumerías Bodybell, que no titubeó al empapelar varias ciudades españolas con carteles ofensivos.
Por suerte muchos ciudadanos no se estuvieron quietos y replicaron rápido:

En fin, esperamos sinceramente que a los genios de la publicidad que se les ocurrieron semejantes despropósitos no solo no les den premios, si no que los hayan despedido. O por lo menos que consulten sus brillantes ideas con muuuuuuucha gente antes de darlas por buenas.