Un violador se declaró transexual para poder abusar de mujeres en una cárcel femenina

Karen White había sido condenado por violar a dos mujeres y realizar tocamientos a una menor

La política penitenciaria del Reino Unido permite que los reclusos sean encerrados con personas del género con el que se identifican. Y Stephen Wood, un criminal británico de 52 años acusado de varios delitos de violación contra mujeres y de conductas obscenas contra una menor, declaró sentirse mujer. De esta forma, y ya bajo el nombre de Karen White, fue trasladado por las autoridades a un módulo femenino de la cárcel de New Hall en septiembre de 2017. Allí, y solo unos días después de su encarcelamiento, cuatro reclusas denunciaron haber sido agredidas sexualmente por la delincuente británica.

En concreto, y según informa el diario británico The Telegraph, las víctimas de White le acusaron de acoso sexual, contacto sexual, acoso verbal, tocamientos sexuales y exhibicionismo genital. El fiscal Charlotte Dangerfiel explicaba recientemente al tribunal que investiga el caso uno de los incidentes denunciados por una de la presas: "El acusado se paró muy cerca de ella, le tocó el brazo y le hizo un guiño. Su pene estaba erecto y sobresalía por la parte superior de sus pantalones".

En otra ocasión, según el propio Dangerfield, White habría colocado la mano de otra reclusa en su pecho izquierdo mientras realizaba comentarios sobre sexo oral. También ha sido acusado de frotar sus caderas y su pene contra otra prisionera y, más recientemente, de besar en el cuello a una compañera de módulo. Karen White —que en un principio se declaró inocente alegando que no sentía atracción sexual por las mujeres y que sufría disfunción eréctil— ha terminado confesando esta semana dos de los cargos de contacto sexual que pesan ahora sobre ella, pero continúa negando los otros dos restantes.

Algunas amigas de la convicta han cuestionado su supuesta transexualidad alegando que nunca le fue diagnosticada disforia de género. Sea como sea, Nicola Williams, portavoz de la organización Fair Play For Women, han cuestionado la historia de White: "Esto demuestra que las evaluaciones de riesgo no son suficientemente buenas porque permiten que un violador con pene ingrese en una prisión para mujeres". El Ministerio de Justicia ha pedido disculpas por no tener en cuenta los antecedentes penales de White y han trasladado al acosador a una prisión para hombres.