Hace tiempo que el imaginario colectivo dejó de ver a las personas que practican el pole dancing como strippers. Por suerte, hoy día bailar en la barra es tan común que desde tu vecino del quinto hasta tu tía Paqui podrían practicarlo sin ningún problema ni prejuicios. Otra cosa es que debido a la complejidad de los movimientos atléticos que se requieren ascensos, giros e inversión corporal, el nivel del pole dancing esté subiendo como la espuma y que, a estas alturas, pueda considerarse como un tipo de gimnasia tanto aeróbica como anaeróbica o fitness capaz de competir al más alto nivel.
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Al menos así lo entienden desde la International Pole Sports Federation IPSF cuyo objetivo en estos momentos es “promoverlo como un deporte atlético”. El caso es que la labor de la federación está consechando sus primeros logros, consiguiendo 11.000 firmas a favor de su consideración como deporte, y la Global Association of International Sports Federation GAISF ya habría accedido a considerar la disciplina como un deporte profesional y, por tanto, habría abierto sus puertas a la participación en unos Juegos Olímpicos a partir del 2024.
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“Haremos todo lo posible para ayudarles a mostrar todo su potencial y algún día formar parte del programa olímpico”, explicó el presindente del GAISF, Patrick Baumann. Por su parte, la presidenta de la IPSF, Katie Coates, se mostró enormemente satisfecha sobre el paso adelante asegurando en una entrevista con el diario The Telegraph: “Ahora el ‘pole’ puede ser visto como lo que debería ser un deporte y no como una manera controvertida manera de crear excitación. Siempre soñé con marcas como Nike esponsorizando nuestros atletas y competiciones. Por fin es una posibilidad real”.
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“Estamos tan lejos del mundo de los clubes de striptease como se puede estar. Decir que somos lo mismo sería como comparar el Tour de Francia con una competición de BMX”, añadió dejando claro que no habría problema en competir. De hecho, la presidenta es muy optimista respecto a las posibilidades de que el deporte se equipare a los logros conseguidos por otras disciplinas como el breakdance el conocido baile de finales de los 80's o el cheerleading animadoras/es que podrán ser olímpicas en 2024.
Por tanto, y según sus argumentos, ¿será posible ver las primeras barras en Paris 2024?