Un estudio afirma que si vives pegado al teléfono tienes la autoestima muy baja

Un estudio noruego dice que si vives pegado al teléfono es que tienes una autoestima baja o altos niveles de narcisismo.

Cada vez son más las personas que viven pegadas a su smartphone. Están ahí y se nos ofrecen para 'mejorar' cualquier aspecto de nuestra vida cotidiana: trabajo, ocio, información en Instagram, Facebook, WhatsApp, Twitter, Snapchat, Youtube, email... Parece que, realmente, ya no sabrías vivir sin tu Iphone/Samsung último modelo en la mano. Pero, ¿por qué te pones tan nervioso cuando pasas un rato sin conectarte? Pues, según una encuesta nacional llevada a cabo por las autoridades de Noruega, cada vez que enciendes la pantalla estás buscando alimentar tu ego.

El objetivo de este estudio, en el que participaron más de 2500 personas de entre 16 y 88 años, fue examinar si había alguna relación entre la adicción a las redes sociales y el narcisismo o la autoestima o la falta de ella. Los autores del mismo explican que quisieron analizar esto porque las redes sociales implican una actividad que impulsa a "mostrarse uno mismo y a recibir críticas, cosa que recae directamente sobre la concepción que tenemos de nosotros mismos". Resultat d'imatges de addicted to phone gif

En este sentido, los resultados mostraron que sí existe un perfil tipo de adicto a la tecnología menor de edad, mujer, soltera, estudiante, con bajo nivel de ingresos y educación. Por otro lado, también mostraron que, efectivamente, las personas que dijeron pasar más tiempo delante del teléfono mostraron unos niveles más altos de narcisismo pero, al mismo tiempo, adicto a la tecnología La razón a esto es que, del mismo modo que los que presentan un ego mayor se sienten atraídos por internet debido al gran abanico de actividades de interacción con otras personas que lleguen a apreciarles, los que tienen una baja autoestima lo hacen por el hecho de no tener que interactuar cara a cara con ellos y, si en algún momento se sienten mal consigo mismos, simplemente se van. 

No tiene nada de malo pasarte por Twitter, Instagram o Facebook de vez en cuando a subir fotos de tu último viaje poniendo morritos. Pero, si empiezan a obsesionarte los likes que consigues con ello, tal vez sería momento de apagar el teléfono y desconectar un tiempo.