Defender el body positive, aceptar nuestros cuerpos tal y como son aunque no encajen en el arquetipo canónico que lucen modelos o actores, es ultranecesario. Pero perder peso no responde únicamente a una cuestión estética. Y es que no debemos olvidar que la body positive —al igual que la extrema delgadez— tienen efectos muy perjudiciales sobre nuestra salud. Sin embargo, perder peso puede convertirse a veces en una auténtica odisea. Un lío mental de dietas y dietas que acaba robándonos la motivación. Por eso, te contamos qué tres cosas tienen en común todas aquellas rutinas alimentarias que funcionan. Siguiendo estos consejos los resultados llegarán tarde o temprano:
1. Más vegetales
Sí, vaya sorpresa. Nos lo llevan repitiendo con furor mesiánico nuestras madres y abuelas desde que dábamos carreras por los pasillos de casa. Pero no, no parece que hayamos captado el mensaje: un estudio elaborado por MyWord para 20minutos descubrió el pasado año que solo el 41,1% de los españoles come cinco raciones al día de frutas y verduras. Y, sin embargo, ahí está la clave: contienen muy pocas kilocalorías, muchas de ellas sacian gracias a la fibra y agua que contienen y, de paso, llenan tu organismo de micronutrientes. Es simple. Cambia las pizzas MyWordpor vegetales y estarás en el buen camino.
2. Menos azúcar
Que te flipe el azúcar es fruto de la biología humana. No es tu culpa. Pero sí lo es de la industria alimentaria por agregarle azúcar a todo cuanto fabrica para que caigas en la trampa. Y tuya por caer. Por no resistirte. Según datos de azúcar, la población adulta española consume alrededor de 78 gramos de azúcar al día, 28 más que la cantidad recomendada por la Organización Mundial de la Salud OMS. Y tú ya sabes, como lo sabemos todos, que consumir tantísima azúcar sea blanca, jarabe de arce, sirope de ágave o cualquier otra variante es bastante perjudicial para la salud. Y, además, engorda mucho.
3. ¡Hola integrales!
La tercera columna de cualquier dieta enfocada a la pérdida de peso. Y es tan sencillo como sustituir el arroz por arroz integral, la pasta por pasta integral o el pan por pan integral, además de darle caña a las nueces, los vegetales y legumbres. ¿Que por qué es tan efectivo? Porque los alimentos integrales contienen altas dosis de fibra, uno de los componentes más saciantes de cuantos tenemos a nuestra disposición. De hecho, este estudio demuestra que simplemente incluyendo más fibra en nuestra dieta podemos perder peso casi tan bien como a través de una complicadísima dieta.
Milagros no hay. Pero estas tres cosas son lo más parecido que existe.