Estos tres mantras te ayudarán a decidir si debes cortar con tu pareja

Las relaciones amorosas son complicadas. Cuando llegan las peleas, la falta de comunicación y el descenso de la ilusión, es posible que llegue el punto en que sea necesario separar los caminos y comenzar una andadura en solitario o con otra persona. Pero claro, tomar esa decisión puede ser muy difícil. Es el instante en el que nacen las dudas: cómo decirlo, cuándo, explicar los motivos, hacerlo sin herir a la otra persona y, sobre todo, intentar terminar en paz y bien. Todos estos puntos hacen que tomar esa determinación se te haga cuesta arriba.

Aunque lo importante es mantenerse en una postura positiva y escuchar la intuición,  desde Elite Daily, además, explican que hay tres mantras en los que apoyarse para no flaquear.

Hay un problema muy grande con las relaciones insanas. La toxicidad que generan puede dañar la autoestima, producir inseguridad y generar dependencia emocional. Tres sentimientos que destruyen, poco a poco, la personalidad y quiebran la individualidad. Es necesario recordar que la felicidad de cada uno es primordial y, por tanto, es más importante que la de tu pareja. Si esa otra persona está a gusto en ese tipo de relación, no es algo que te concierna en absoluto. Mereces ser feliz y estar bien contigo mismo y con tu entorno, si eso no es así es hora de terminar con la relación. Identifica cómo te sientes para poder dar el paso.

¿Y qué sucede cuando una relación no es tóxica? Porque es cierto, hay relaciones que no lo son pero que han perdido la ilusión, la chispa, esos nervios y esas alegrías que tenías estando a su lado. Si la conexión se debilita, los motivos pueden ser varios pero, seguro, que uno de ellos es que os habéis acostumbrado, que la rutina os ha ganado la partida y que es lo mismo estar con esa persona que con otra cualquiera. Poner de tu parte es el primer paso para sanar esto pero si ya lo has hecho y no recibes nada a cambio debes recordarte a ti mism@ que mereces que te quieran y que cuiden esa unión. Cuando eso desaparece por completo y no hay cambios hay que dar fin a lo que tenéis.

Mantenerse en una relación que no genera felicidad por ningún lado por miedo a estar en soledad es aún más insano. Lo sigue siendo si el miedo es el de herir a la otra persona. Las rupturas son difíciles de llevar a cabo, es una etapa complicada por la que hay que pasar cuando algo no funciona. Pero es verdad que el tiempo lo cura todo y tomar la decisión hará que crezcas y madures. Los cambios, aunque duros y lentos, traerán nuevas y buenas experiencias. Harán que todo vaya bien.