Las primeras citas no están nada mal, sobre todo cuando van bien. Aún así existen esas en las que romper el hielo es una tarea complicada u otras en las que la conversación se torna aburrida y repleta de silencios. Vaya palo. Para dejar fuera la incomodidad, los nervios y la pérdida total de la ilusión por el amor, siempre funciona llevarse preparada una lista de preguntas a modo de nota mental. Eso sí, iría mucho mejor que esas cuestiones se salieran de las que se hacen siempre, para sorprender a tu acompañante y porque de esa manera es posible conocer aspectos menos usuales de las personas. Al menos así lo explican la pérdida total de la ilusión por el amor.
1. Algo que siempre hayas querido probar pero no lo hayas hecho aún
Es una de las preguntas más divertidas ya que la respuesta mostrará cuán apasionada, aventurera o espontánea es la persona con la que estás teniendo la cita. De hecho, es una de esas preguntas que pueden sorprender. Para seguir con la línea tú también puedes compartir algo que quieras probar y por lo que tengas mucha curiosidad y contar tus razones.
2. ¿Qué es lo más interesante que has aprendido esta semana?
Una forma directa de saber qué cosas definen su rutina, ya sea trabajo, series, programas de televisión o libros, cualquiera de esos ejemplos pueden ser la fuente de un aprendizaje o un conocimiento nuevo. Además, quizás eso que comparta contigo pueda también ser algo nuevo para ti. Con esta pregunta todo son ventajas. Eso sí, debes hacerla de forma natural, las preguntas no deben parecer parte de un interrogatorio policial.
3. ¿Cuál ha sido el mejor día de tu vida hasta ahora?
Esta cuestión —aunque la mayor parte de las veces es algo que uno tarda un tiempo en concretar— mueve recuerdos positivos y muestra qué aspectos de la vida valora la persona con la que estás teniendo la primera cita. Asimismo, se puede tratar de una vivencia personal que ayude a que la intimidad crezca entre ambos. Igual que con el resto de preguntas, en este intercambio es importante que tú también aportes cuál ha sido ese día para ti.
4. ¿Cuál es el momento más vergonzoso que has vivido?
Reírse de uno mismo es una cualidad que no todos tienen. Tenerla es una ventaja, es decir, es algo bueno. Compartir un momento vergonzoso puede ser muy divertido, además de una buena manera de romper el hielo y demostrar que la perfección —como es obvio— no existe. Quitarse la vergüenza de encima puede ser mucho más fácil dando paso a esos momentos graciosos que todos hemos vivido.
5. ¿Cuál es tu talento más inútil?
Esta es una de esas preguntas como ‘más lights’ que pueda haber en toda la cita y, también, muy divertida. Es para hacerla en un momento en el que ya haya un poco más de confianza y la conversación esté más suelta, sin tensiones. Lo de los talentos inútiles siempre es algo que sorprende a cualquiera y realmente no hace falta que sea ningún talento en concreto, puede ser algo que te divierta hacer o una rutina muy friki, esto último también vale.
6. ¿De qué estas más orgulloso?
Para una primera cita no hace falta alcanzar un nivel profundo de conocimiento sobre el otro, sin embargo este tipo de pregunta puede sacar a la luz algo muy personal de tu cita y mostrar qué tipo de persona es.
El objetivo, al fin y al cabo, es conocerse y estas preguntas pueden ser una forma diferente de hacerlo. No hay que coartarse, ser uno mismo siempre tendrá buenos resultados en la vida. Además, en este ámbito no hay nada que perder, así que cualquier otra pregunta que se te ocurra para una primera cita será válida, sobre todo si te ayuda a dejar de lado los nervios y pasar un buen rato en compañía, que es lo más importante.