Cuando una relación de pareja termina, no siempre acaba bien. Son varias las vías a través de las cuales el amor puede menguar: puede ser una ruptura confusa, donde no se sepan del todo los motivos, puede ser fea, donde se acabe de forma tajante y fría o puede ser indiferente, donde parece que a nadie le afecta que el amor se acabe. Sea la forma que sea, puede haber relaciones que continúen en ese tira y afloja, sobre todo si hay una de las partes que siente mayor dolor. En ese vaivén, a veces, entra el sexo y, aunque uno de los mejores consejos es no acabar enredadx entre las sábanas de una pareja anterior, no siempre se puede seguir. Pero, ¿por qué ocurre esto? Hay algunos motivos que lo explican.
"Las relaciones sexuales con una ex pareja romántica con quien la persona estuvo en una relación comprometida a largo plazo, ocurren casi siempre dentro de las dos semanas después de la ruptura”, explican desde Psychology Today. La investigación que nombran muestra que la tristeza que provoca el fin de una relación alcanza su pico dos semanas después y comienza a disminuir alrededor de cuatro semanas después. Cuatro semanas después de la ruptura también es cuando las personas tienden a tener relaciones sexuales con una nueva pareja, aproximadamente.
Dentro del mismo estudió se investigó qué personas están más abiertas a tener relaciones sexuales con una ex pareja, en este caso los hombres se mostraron más propensos a decir que tendrían relaciones sexuales post ruptura. Donde no había diferencia de género era cuando se trataba de utilizar el sexo como herramienta para mostrarle al ex lo que se estaba perdiendo. Vamos, a modo de venganza.
Entendiendo este como uno de los motivos por los que las personas acaban teniendo sexo con una ex pareja, las respuestas se agruparon en los tres siguientes puntos:
Mantenimiento de la relación
Esto ocurre porque la persona aún tiene sentimientos, extraña a la pareja, siente soledad y busca poder mantener este contacto durante el mayor tiempo posible aunque sepa que no acabará bien.
Motivos hedonistas
En este aspecto la experiencia es más positiva. Las partes de la pareja comprenden y recuerdan que el sexo era un contacto satisfactorio y desean aliviar la tensión sexual y sentir comodidad. Para que este sea uno de los motivos hay que poder tener cierto nivel de madurez para que la el momento post sexo no sea desagradable o doloroso.
Sentimientos ambivalentes
En este punto entra el hecho de lidiar con emociones no resueltas, utilizar el sexo como medio para un fin, incluso cuando se trata de sexo con odio o como herramienta de venganza. Esto tiene como objetivo intentar recuperar el poder y la seguridad en unx mismx.
Además de estos tres motivos, los investigadores encontraron algunos otros que no encajaban en ningún grupo, como el sexo impulsado por el alcohol o esos polvos que buscan ser “el último” a modo de despedida y que no suelen acabar bien.