El perfeccionismo es agotador. Esa búsqueda absurda de una vida ideal solo te ha traído estrés y frustración. Porque no existe. Es un horizonte inalcanzable. La vida real no es así. Es caótica. Es imperfecta. No necesitas estar perfecta para pasártelo bien. No necesitas ser la mejor para sentirte válida. No necesitas que un momento esté milimétricamente medido para que sea genial. Y, obvio, no necesitas que un festi sea perfecto para disfrutarlo a full. Aquí tienes una guía para disfrutarlo como solo lo hacen los que son #FansDeLaRealLife
La mochila ligerita
Los buscadores de la perfección no saben cuándo parar de meter cosas en la mochila. Es muy tentador eso de me lo llevo porque podría hacerme falta en algún momento y no quiero que se estropee la vibra. Pero, querida, la vibra ya se estropea con esta actitud. Lo que de verdad importa en tu mochila es el abanico, las gafas de sol, algo de purpurina si te apetece y las ganas de moverte. Si cabe un desodorante mini, mejor, pero no te rayes, que el ambiente es el que es. Y, sobre todo, la compañía. Que sea buena y haya match.
El mood relajado
La tensión no ayuda a disfrutar de la vida. Y si estás ahí, en festis como el VIDA Festival 2025, es para gozar y olvidarte del mundo unas horas. Acércate a la barra de Gin MG y métete de lleno en el mood festivalero con un primer Gin Tonic made in Spain: elaborado en Vilanova i la Geltrú con ingredientes 100 % naturales y enebro de cultivo propio, recolectado a mano en una finca familiar de Teruel. Con su hielo, un twist de limón y nuestra ginebra de siempre. En vaso de plástico porque no todo puede ser perfecto, pero es que no tiene que serlo para ser increíble. El perfect serve es el que hace feliz.
El outfit fresh
¿Sabes esa sensación tan poderosa de ponerte algo megacómodo y caminar entre la gente como si fueses envuelta en un Schiaparelli? Pues eso es lo que buscan los fans de la real life en los festis. Porque aquí no se viene a impresionar: se viene a pasarlo bien y para hacerlo, tienes que ir cómoda. ¿La clave? No es lo que llevas, sino el flow con el que lo llevas. La seguridad que transmites. La confianza en que la imperfección es perfecta. Con chándal, las zapas algo sucias y tu Gin MG en la mano. Si eso no es aura...
El cartel con calma
Esto es de primero de obsesión con el perfeccionismo festivalero: hacerte una lista con los artistas que quieres ver y no darte margen ni a ti ni a tus colegas para salirse de ese guion. Y sí, lo sabemos: tienes tus favoritos marcados en fosforito, pero atrévete a soltar un poco el control y dejar hueco a los descubrimientos. Experimenta el festival de una forma más auténtica: el flechazo con una banda que nunca escuchaste, la canción que no sabías que era de ese grupo o el público con un rollo totalmente distinto al tuyo que te enamora.
La previa con sorpresas
Si fuera por tu voz interna más perfeccionista, harías una previa cerrada con tu squad, con la playlist bien seleccionada y cero margen al caos. ¿A que sí? Pues exorcismo. Sácate ese demonio idealista de dentro. Nuestro consejo es que montes una mini verbena con amigas y amigas de amigas y te dejes llevar: habla con gente nueva, baila con desconocidos y deja que esa música que nunca escuchaste te posea. Ah, y brindad con ese Gin MG que todo lo une, porque no necesitas una vida perfecta para brindar por ella. Solo ganas de disfrutar la tuya.
Del festi a la vida
Recuerda, para este festival, para cualquier otro o para la misma vida, no hace falta complicarse para hacerlo bien. Ya hay mucha presión en el ambiente para añadirte más y, cuando el producto es bueno, sea un Gin MG o una aventura, todo fluye. Y no es solo lo que ganas aflojando el perfeccionismo en estas experiencias en sí. Es también lo que se queda contigo: un nuevo mood que te ayudará a afrontarlo todo de la mejor manera posible. Como fan de lo real. De lo espontáneo. De lo original.
* Gin MG recomienda un consumo responsable / 40% Vol.