Shoronpo es un restaurante de cocina tradicional asiática que ofrece una experiencia gastronómica desenfadada, accesible y fiel a la técnica japonesa. Tras el éxito del local de Gràcia, la marca abre ahora un nuevo espacio en el barrio de Sants (Av. Roma, 1), que mantiene la misma filosofía y estética que la han convertido en un punto de encuentro para los amantes del ramen y los dumplings.
Una historia de renacimiento
El proyecto original nació en la calle Séneca de la mano de Keita, y el restaurante alcanzó gran popularidad. En 2020, Nayef Ghazi y Pol Canals se unierona Keita para darle una nueva oportunidad a Shoronpo: recuperar el espíritu del local original, pero con mayor calidad y un enfoque más estético y minimalista. Así nació el nuevo Shoronpo en la calle Dr. Rizal, en el corazón de Gràcia, donde la marca se consolidó bajo un nuevo lema: The House of Tantanmen.
Cocina casera, honesta y sin excesos
La carta mantiene los platos más emblemáticos de la tradición japonesa adaptados al ritmo de Barcelona.
- Shoronpo: empanadillas japonesas de carne de cerdo picada y verduras al vapor.
- Tantanmen: fideos caseros de ramen con caldo de pollo, salsa de sésamo, cerdo salteado, bambú, puerro, huevo y rayu.
- Karaage: pollo rebozado al estilo japonés con mayonesa.
Cada receta se elabora con respeto por la técnica y atención al detalle, poniendo en valor el producto y la experiencia gastronómica sin excesos ni artificios. La cocina está dirigida por Keita, responsable también del Shoronpo original, que mantiene vivo el equilibrio entre tradición y cercanía.
Un nuevo espacio con el mismo espíritu
El interiorismo del nuevo local lleva la firma de Gerard Tejero Studio, y el diseño creativo corre a cargo de Setze Studio. Con capacidad para 28 comensales en el interior y 8 en terraza, el nuevo Shoronpo Sants replica la estética limpia y funcional del local de Gràcia, adaptada aun entorno más urbano y dinámico. Su ubicación, a pocos metros de la estación de Sants, lo convierte además en un punto estratégico para quienes buscan comer bien, en poco tiempo y sin renunciar a la autenticidad.
La carta seguirá la misma línea que en Gràcia, aunque con la mirada puesta en un futuro menú pensado para viajeros y clientes de paso. Autenticidad, tradición y calidad siguen siendo los tres pilares del proyecto: ocinar con respeto a la tradición japonesa y asiática, cuidando cada detalle para que la experiencia sea única en cada visita.
