Más de la mitad del efecto invernadero es culpa de solo 36 empresas

Sí, la mayoría pertenecen al sector de los combustibles fósiles

El discurso negacionista ya no se sostiene por ningún lado. El aumento de la temperatura global es una evidencia. La intensificación de fenómenos meteorológicos extremos es una evidencia. La responsabilidad del ser humano en todo ello es una evidencia. Sin embargo, y aunque obviamente todas y cada una de las personas tengamos nuestra parte de culpa, la realidad es que, según un nuevo informe de InfluenceMap basado en datos de Carbon Majors, más del 50% de los gases de efecto invernadero emitidos a la atmósfera provienen de solo 36 empresas. Es una locura.

¿A qué sectores pertenecen? No es ninguna sorpresa: la mayoría de ellas forman parte de la industria de la quema de combustibles fósiles, ya sea petróleo, gas o carbón. Una industria ultracontaminante a la que deberíamos estar dando plantón poco a poco pero cuyas emisiones aumentan respecto al año anterior. Probablemente no ayude que un líder mundial como Trump pase del cambio climático, de las energías renovables y de la protección medioambiental. Hay asimismo varias empresas del sector de la producción de cemento dentro de esas 36 compañías.

Pero pongámosles nombre: la petrolera Saudí Aramco, la multinacional del carbón Coal India, la empresa estatal china CHN Energy, la empresa estatal china Jing Group, la compañía National Iranian Oil Company o las empresas de capital privado como ExxonMobil, Chevron, Shell, TotalEnergies o BP. La próxima vez que compres de segunda mano para no contaminar más de la cuenta acuérdate de ellas. Sí, está bien que lo hagas y es necesario, pero piensa cuánto cambiaría la situación si estas megacorporaciones se transformaran en opciones más verdes.

Algo que necesitamos urgentemente como especie. En palabras de Kumi Naidoo, presidente de la campaña por un Tratado de No Proliferación de los Combustibles Fósiles, “vivimos un momento crítico en la historia de la humanidad y la alarmante realidad es que las mayores empresas de combustibles fósiles del mundo no solo están aumentando sus emisiones, sino que lo están haciendo en un contexto de fenómenos climáticos que están teniendo efectos devastadores en la vida cotidiana de las personas”. Simplemente no es justo. Es inhumano.

Sin embargo, esto también tiene una difícil lectura geopolítica porque desde el inicio de la Revolución Industrial, ha sido Occidente quien ha contaminado a diestro y siniestro para alcanzar su desarrollo. Ahora, en un momento en el que muchas potencias emergentes tratan de desarrollarse también, con China a la cabeza, les vamos con el discurso de que no pueden hacerlo. De que deben buscar vías más complicadas. Y sí, deben hacerlo por el bien global, pero quizá en Occidente tengamos una deuda importante que pagar para equilibrar las cosas. La historia no miente.