Un estudio lo confirma: los niños ya no juega en la calle

¿Lo malo? Afecta negativamente a su salud y a su felicidad

Parte de la persona que soy hoy viene de la calle. Del tiempo que pasaba en Tarifa corriendo de aquí para allá, haciendo nuevos amigos e inventando juegos absurdos que en aquellos momentos me parecían lo más emocionante del mundo. Y no había nada que me gustara más. Ni siquiera el Pokemon de la Game Boy o la salida de la Playstation eran suficientes para mantenerme en casa. Hiciese sol o lloviese. Yo quería jugar en la calle. Y obvio que no es un caso especial. Para ti y para infinidad de gente la historia es parecida. No para los niñxs actuales: un porcentaje alarmante de ellxs no juega en la calle ni un solo minuto de la semana.

Es la conclusión de una nueva investigación llevada a cabo por científicxs de la Universidad de Exeter, en el Reino Unido, y publicada en la revista especializada Wellbeing Space and Society. En concreto, el equipo realizó un examen profundo del estudio anterior Born in Bradford, que lleva desde 2007 monitoreando la vida de más de 13.000 niñxs para descubrir qué contribuye más a su felicidad y salud. Y los números son muy tristes: el 34% reportó no jugar al aire libre entre semana y el 30% no hacerlo ni siquiera durante los fines de semana. Van del colegio a la casa y de la casa al colegio. Y quizá alguna extraescolar en medio.

Esto en el Reino Unido. Pero no creas que es algo aislado: como apuntan desde Gizmodo, “los hallazgos coinciden con otras investigaciones realizadas en otros lugares: un estudio de 2023 reveló que casi el 40% de los niños de los Estados Unidos en edad preescolar jugaban menos de una hora al aire libre entre semana, mientras que el 24% jugaba menos de una hora al aire libre los fines de semana”. Es un fenómeno global que afecta a todos los países occidentales. No es un comentario de boomer y ya. Realmente lxs niñxs ya apenas pasan tiempo en las calles de sus pueblos y ciudades. Toda su vida es casera y muy digitalizada.

Y sí, es tan malo como suena. No es solo cuestión de nostalgia. Para que te hagas una idea de la influencia de jugar en la calle, el estudio Born in Bradford llegó a la conclusión de que “los niños que salen al aire libre con más frecuencia tienden a tener una mayor estabilidad social y emocional”. Algo que tiene todo el sentido del mundo. Al fin y al cabo, la calle te enseña desde muy pequeñx a relacionarte con el mundo, a desarrollar habilidades de negociación y adaptación, a mezclarte con todo tipo de personas y, en definitiva, a vivir. El meme de Te falta calle va camino de convertirse en un a esta sociedad le falta calle. Ojalá lo evitemos.