Os encantáis, es el amor de tu vida y cuando os veis se os alegra el día y seguís con la complicidad de los primeros meses. Pero ya lleváis cuatro o cinco años viviendo juntxs, nueve o diez como pareja y aunque sois jóvenes ya no es como antes y la llama del deseo sexual se viene apagando últimamente. La rutina, la fatiga mental por las preocupaciones del trabajo y de la pandemia, y a veces simplemente la pereza y el acomodo os están pesando. Pero no, llevar muchos años en pareja no significa que no podáis tener buen sexo.
Un artículo reciente de Psychology Today resume en cuatro los principales consejos para mantener buen sexo en las relaciones de larga distancia. Y no tienen tanto que ver con el sexo anal, el strap-on, el beso negro o el poliamor como con el chip mental con el que afrontar el día a día o noche a noche en la cama o en la mesa de la cocina con tu pareja.
Para empezar, hay que quitarse la presión y aceptar los cambios de escenarios. Más sexo no significa que sea siempre mejor y no hay que satisfacer a la pareja si no te apetece tener sexo. Follar sin presión es follar más ligero, cuando te apetezca y sin tener en cuenta si el promedio es de dos o tres veces a la semana o de una, porque algunos estudios muestran que, aunque las relaciones con sexo frecuente son más felices eso no significa que a más cantidad de sexo más felicidad. No va a peso y lo importante es hacerlo cuando a las dos partes de la pareja le apetezca.
Dicen que la confianza da asco y cuando la confianza es intimidad puede acarrear cierto aburrimiento. Pero desde la psicología advierten que sentirse valorado y respetado, querido, también puede potenciar el deseo sexual. Y que, por tanto, esa intimidad que tienes con tu pareja y con nadie más puede ser más sexual si la potencias que lo misterioso o lo desconocido, que suelen asociarse más al deseo.
La diversión fuera de la cama es el tercer consejo de Psychology Today. La cena que se alarga con jueguecitos de pies debajo de la mesa y miraditas, esa escapada a la montaña a hacer escalada y rafting en que os han pasado cosas divertidísimas, la quedada con amigxs que os ha hecho reír tanto...Cuando lleguéis a casa después de haberlo pasado bien fuera, la cama os esperará con más ganas.
La creatividad y poner en común vuestras fantasías puede ser el cuarto pilar de la reactivación sexual de una pareja que lleva años conviviendo. Siempre de la mano de la comunicación y el consentimiento, por supuesto, pero nunca es mal momento para poner sobre la mesa aquella fantasía sexual que habías aparcado. El blog de vida sexual de Sanitas añade a estos consejos unos cuantos más: mantener una actitud activa, espontaneidad, buscar tiempo para la intimidad, reavivar el romanticismo con gestos y sorpresas y los grandes comodines de entre todos los consejos relacionados al bienestar: buen descanso, buena alimentación y ejercicio físico. Y a follar y ser feliz.