Leonardo da Vinci es considerado el mayor inventor de la Historia. La bicicleta, el paracaídas, el helicóptero… Grandes aportaciones a la Humanidad. Pero, ¿qué hubiera pasado si, además de para sus estudios, hubiera tenido que sacar tiempo para comer con su suegra los domingos? ¿Hubiera podido Leonardo da Vinci componer sus obras maestras dedicando la mitad de la mañana a llevar a sus hijos al colegio? ¿Sería hoy Leonardo da Vinci una heroína si hubiera tenido que levantarse de madrugada para dar el pecho a sus hijos en lugar de batallar en nombre de Francia? Eh, que igual me aventuro, pero yo creo que ni de coña. Leonardo da Vinci , Leonardo da Vinci , Leonardo da Vinci … Grandes nombres de la Historia con algo en común: toooooodos solteros.

Cada vez son más los psicólogos que creen que la soltería tiene más ventajas que estar en pareja. La autora Bella DePaulo, de la Universidad de California, es una de ellas. En su libro Single out plantea algunas razones por las que sentirse orgulloso de estar soltero y desterrar esa tontería de ‘te vas a quedar para vestir santos’. Oye, que cada uno viste o desviste lo que le da la gana, y no hay por qué sentirse de menos por ser independiente y no vivir en pareja.
1. Los solteros duermen mejor
Y no lo digo yo. Ni siquiera DePaulo. Lo dice un estudio de The Better Sleep Council realizado sobre 542 personas. Tras el análisis, se llegó a la conclusión de que las personas que no viven en pareja y, por lo tanto, no duermen siempre acompañados, concilian mucho mejor el sueño. Ni ruidos, ni movimientos ni ronquidos. Los solteros tienen toda la cama para ellos y, por eso, nadie les puede pegar un rodillazo en las costillas esperamos que sin querer. Probablemente, Platón no hubiera sido uno de los mayores filósofos de la Historia si su pareja no le hubiera dejado dormir en condiciones.
2. Los solteros tienen un corazón más sano
Es la conclusión otro estudio realizado a 9.000 personas. La salud coronaria de los solteros hombres y mujeres era mucho mejor que la de los casados, así que fuera ya ese mito de que los singles son unos juergas y unos ‘viva la vida’. Que los habrá, pero que una cosa no lleva necesariamente a la otra. Así que, probablemente, Alejandro Magno no hubiera sido uno de los mayores conquistadores de la Historia si hubiera compartido dormitorio.

3. Los solteros tienen mucha mayor independencia económica
Esto es obvio. ¿Imagináis que Beethoven no hubiera podido comprarse un piano por tener que pagar una casa de 3 dormitorios? Menos mal que este también se quedó soltero y no tuvo que dar explicaciones de a dónde iban sus ahorros. El estudio The Role of Money Arguments in Marriage realizado sobre 1.700 mujeres entre 1988 y 2006 asegura que la mayor fuente de conflictos en los matrimonios son las disputas relacionadas con el dinero.
4. Y ojo con esto Los solteros encuentran trabajo con mayor facilidad
Así lo concluyó un estudio de la Universidad de Chicago en 2009. Toma ya. Tal vez por ser dueños de su tiempo, por no tener que contar con otra u otras personas para elaborar su agenda, por no tener la tensión de encontrar un trabajo determinado para compatibilizarlo con tu vida personal, por sólo estar obligado a ganar dinero para cubrir tus necesidades… El caso es que los solteros se colocan antes que los casados. Lo mismo el Greco, otro single de la Historia, no hubiera recibido tantos encargos de haber contraído matrimonio con una alegre y vivaracha toledana…
5. Los solteros ponen más pasión en todo lo que hacen
Parecido a lo anterior: los casados buscan un trabajo mejor pagado, mientras que los solteros prefieren una ocupación interesante y constructiva, sin pensar tanto en el dinero. Puede que Van Gogh no hubiera pintado nunca sus girasoles de haber tenido que pagar la hipoteca de un adosado en Ámsterdam.

La de cosas que la Humanidad se hubiera perdido si algunos de los solteros más famosos de la Historia se hubieran casado. Afortunadamente, nunca nadie le echó en cara a Newton pasar poco tiempo en casa. Newton pudo concentrarse en sus novelas sin que su marido se enfadase por desatender a sus hijos. Tampoco nadie le dijo a Newton que fíjate, que qué poco te preocupas de sus hijos. Solteros del mundo, no os agobiéis, quizá el destino os tenga preparado una página en las enciclopedias. Y si no es así, retomando la idea del principio, pensad que es mejor vestir santos que desvestir borrachos. ¿O no?