Si has llegado hasta aquí es porque seguramente te lo estás planteando. Llevas ya un tiempo con tu pareja y empieza a asomarse esa idea en tu cabeza: iros a vivir juntxs. Incluso puede ser que lo hayáis mencionado ya alguna vez, pero aun así se trata de una de esas decisiones que dan vértigo, sobre todo por las posibles consecuencias que pueda tener en vuestra relación. Pero, ¿cómo puedes saber que realmente ya estáis listxs para iros a vivir juntxs?
Vayamos por pasos, primero de todo plantéate si realmente quieres irte a vivir con tu pareja porque tienes ganas, o porque “todo el mundo lo hace” y “ya va siendo hora”. Vivir en pareja es una de las múltiples opciones que existen y es igual de válida que querer vivir separadxs o compartiendo con otras personas. Pero ante todo, la decisión tiene que ser compartida, nunca impuesta.
La comunicación sobre el tema es clave, pero también hay otros indicadores que te pueden ayudarte a decidirte, por ejemplo el tiempo que pasáis juntos a solas. Haber estado todo un fin de semana conviviendo o haber ido alguna vez de viaje, pueden servir como referencia de que tal lleváis la convivencia. Es en esos momentos que descubres sus manías y las tuyas. Ser capaz de ir al lavabo con él o ellx en la habitación de al lado sin que te dé vergüenza también es un punto a tener en cuenta. Si te tienes que aguantar hasta que os despedís mejor plantéatelo, sobre todo por la salud de tus intestinos.
La prueba del cepillo de dientes también es un buen indicador. Que no te genere agobio tener su cepillo de dientes en el baño o tener una muda de ropa suya en un cajón es una muestra de que ya estás acostumbradx a la presencia de esa persona. Y lo mismo al revés, que a tu pareja no se le haga incómodo ver tu cepillo de dientes al lado del suyo. En caso contrario, si esto os genera incomodidad, mejor daros un tiempo más para plantear la idea de iros juntxs.
Saber dejar espacio también es importante a la hora de vivir juntxs. Es importante que ambxs tengáis vida más allá de vuestra relación: cuidar lxs amigxs, la familia, proyectos personales, aficiones… Que no todo gire alrededor de tu pareja, ya que cuando viváis juntxs puede ser más fácil que os acabéis aislando del resto de vuestro entorno. Por eso siempre hay que cuidar a lxs amigxs y buscar tiempo para verlxs.
Tener la confianza suficiente para hablar de todo, incluso del dinero que ganáis cada unx. Si vais a vivir juntxs tenéis que ser sincerxs con el otro para evitar conflictos futurxs. Hay que poder comentar que nos molesta de la otra persona, aunque también tenemos que ser conscientes que no la cambiaremos por completo. Y de hecho es importante no querer cambiarla, porque entonces lo que tendrías que plantearte es si realmente quieres seguir con él o ellx.
Al fin y al cabo, vivir con tu pareja no es tan diferente a hacerlo con otras personas. Lo crucial es que antes de dar el paso habléis bien de las normas que queréis tener, desde la limpieza, hasta el tema de pagar las factura. Además, asume que no todo será perfecto y que muy probablemente habrá días en los que os enfadaréis y os discutiréis. También habrá momentos en los que desearás estar solx. Es muy importante tener interiorizado que esto también puede pasar para no entrar en crisis llegue el momento.