Las formas de intimidad no sexual más importantes

La intimidad es un ingrediente fundamental de la verdadera conexión emocional

Necesitas intimidad. Necesitas vivir momentos con otras personas en los que sientas esa cercanía privilegiada. Ese emoción con emoción. Esa calidez inexplicable. Como dicen desde intimidad, la intimidad permite "conectarse en el nivel más profundo, vulnerable, energética y espiritualmente con los demás, no solo con una pareja, sino con amigos, familiares o alguien más en tu vida". Porque no hace falta intencionalidad sexual para que florezca entre vosotrxs. Existen bastantes formas de intimidad no sexual que puedes cultivar en tu día a día.

Ejemplos cotidianos

Como escuchar de verdad. Según cuentan desde ese mismo medio, "uno de nuestros deseos más auténticos es ser escuchadxs". Que haya una persona regalándonos toda su atención, sin distracciones, sin interrupciones. Concentrada en lo que dices y en lo que sientes. Y lo mismo en la otra dirección. Es uno de los gestos de intimidad más generosos que puedes hacer. También los cumplidos, que proporcionan un sentimiento de bienestar que "crea una intimidad entre la persona que da el cumplido y la persona que lo recibe". No te prives.

Tampoco te prives de hacer un regalo cuando lo creas oportuno. Cuanto te nazca. "Cuando nos damos cuenta de que el regalador se tomó la molestia, incluso si no nos gusta el regalo, se crea una profunda intimidad y conexión". Porque sabes que le importas. Porque sabes que eres especial para esa persona. El vínculo se refuerza. Las distancias emocionales se acortan. ¿Y sabes con qué más lo hacen? Con la risa. Pocas cosas en esta vida generan tanta sensación de intimidad y confianza como unas cuantas carcajadas juntxs.

Acercarse sin prejuicios

Una de ellas es el afecto no sexual. Estamos muy acostumbradxs a relacionar el contacto físico intenso o continuado con el interés sexual, pero no es más que un prejuicio mental. En ocasiones te cuesta acariciar, besar o abrazar a tus amigxs o a tus familiares. Sin embargo, es un elemento clave de tu relación con ellxs: "Aumenta la serotonina, un neurotransmisor conocido como la hormona del bienestar, que nos ayuda a estar más felices, más tranquilxs y más confiadxs, lo que a su vez permite que la intimidad florezca".

Por último, tienes a tu disposición uno de los mecanismos de intimidad más baratos del mundo: tu tiempo. Pero no cualquier tipo de tiempo, sino tiempo de calidad. Como recuerdan en Poosh, "el simple hecho de estar presentes en la compañía del otro sin tener que llenar el silencio demuestra que están conectados entre sí en un nivel que va más allá de las palabras". No todos los planes deben ser híperestimulantes y dopamínicos. Ese tiempo para vosotrxs de nada, de paz, de aburrimiento incluso, es pura y dura intimidad.