Leíste algo en alguna parte, te lo dijo tu madre o se lo escuchaste a algún colega y tú, como eres tan confiado o tan vago, porque desde que existe Google ya no tienes excusa, pues te lo creíste y ya no volviste a pensar en ello nunca más. Vamos, que estás convencidísimo. Pero, sorpresa, hoy vas a descubrir que no tienes razón y, tal vez, tu vida sexual cambie para siempre. Tranquilo porque, más allá de eso de que te quedarías ciego si te masturbabas que ya no cuela, a todos nos la han colado alguna vez. Pero ojo, con el sexo no se juega, así que hemos venido a desmentir algunas cosillas. Aquí te dejamos seis de esas 'verdades universales' que no lo son en absoluto.
1. Sí, te puedes quedar embarazada teniendo la regla
¡Ay amiga! Y tú teniendo relaciones sin protección. Aclaremos el tema: la ovulación ese periodo del mes en el que el óvulo fértil baja por las trompas de Falopio, más o menos entre 12 y 16 días antes del comienzo de la siguiente menstruación es el momento más fértil del ciclo menstrual de la mujer. Ello no significa que el resto del tiempo seas inmune a los espermatozoides de tus ligues, sino que tienes menos puntos para quedarte embarazada.
Así que, aunque es verdad que las probabilidades son bajas, sí puedes quedarte embarazada por practicar sexo sin protección durante tu regla. Y más teniendo en cuenta que los espermatozoides pueden durar vivos hasta 4 días en el cuerpo de la mujer. Así que si pinchas hoy, teniendo la regla, puede que sus soldaditos te fecunden hoy, mañana, pasado y al otro depende del rendimiento que lleven. Así que ya sabes, no hay excusas para dejar de tomar precauciones.
2. Sí, te puedes quedar embarazada haciendo la marcha atrás
Y hablando de embarazos, ¿de verdad había que explicarte esto? El cuento más viejo del mundo. 'Cariño, la saco antes de correrme', como si ese falso truco no hubiera traído niños al mundo. El hombre no solamente expulsa espermatozoides con la eyaculación, sino también con el llamado 'líquido preseminal'. Sí, ese que se expulsa sin ningún control a lo largo del coito antes del subidón final. Y, sorpresa sorpresa, ese fluido también contiene espermatozoides que podrían convertiros en papás en nueve meses. Como decía mi abuela, "antes de llover, chispea". Así que, para qué arriesgarse.
3. El doble orgasmo femenino no existe

Así que cuando tienes 'orgasmos vaginales' en realidad lo que estás haciendo es estimular el clítoris por su parte interna. Por tanto, lo correcto es hablar, simplemente, de 'orgasmo femenino' y las distintas formas de conseguirlo: tocar el clítoris, por fuera o por dentro, apretar las piernas o incluso solo con la estimulación de los pezones. Lo mejor es que investigues, juegues con tu cuerpo y descubras cuál es la técnica que a ti te hace gozar más. Mientras la encuentras, disfruta del camino.
4. No, follando mucho no vas a adelgazar
En serio, deja de inventarte excusas para no ir al gimnasio. Un estudio de la Universidad de Montreal determinó que en un polvo los hombres queman de media 100 calorías, y las mujeres 69. Así que, a no ser que seáis insaciables y lo hagáis muchísimo y en posturas que os obliguen a hacer sentadillas y abdominales constantes, follar no va a ser la solución a vuestros kilitos de más. Abandona ya la ‘dieta del cucurucho’. O no, que no adelgaza pero no tiene nada de malo.
5. La teoría de la L y otros sistemas 'populares' de medida
Que si tiene la nariz, los pies o la palma de la mano grande la tendrá más grande, que si es calvo será mejor en la cama o que si es muy alto la tiene pequeña. Hay multitud de leyendas que intentan encontrar algún sentido o que pretenden adivinar el tamaño del pene en relación a otras partes de su cuerpo, pero todas ellas han sido desmentidas por diferentes estudios. Así que deja ya de decir que tú en lo primero que te fijas en una cita es en las manos, que ya sabemos todos que no es por si tiene las uñas limpias.
6. Follar mucho no agranda tu vagina al revés
No te preocupes más porque, por mucho que folles, tus paredes vaginales no van a darse de sí, al revés. Por si no te habías dado cuenta qué cosas, oye, esas paredes están hechas de músculo que, al igual que los del resto de tu cuerpo, cuanto más ejercites más vas a fortalecer. Así que, practicar mucho sexo ayuda a tener los músculos de la vagina más tonificados que el vientre de una fit girl de Instagram, serán más elásticos y firmes.
Por otro lado, lo que sí agranda la vagina es el parto, así que tanto si tienes hijos como si no, es importante que hagas ejercicios para mantener fuertes esos músculos. Disfrutarás más tú, tu pareja y evitarás futuros problemas de salud o pérdidas de orina. Y ahora, ¿alguna pregunta más?