En el ámbito de las relaciones de pareja, siempre surgen nuevas tendencias y términos que describen diferentes dinámicas. Una de ellas es el “cuffing”, una práctica cada vez más común en la era digital y que seguramente crecerá durante el verano.
Aunque puede parecer emocionante al principio, el cuffing puede tener consecuencias negativas y ser potencialmente tóxico para quienes participan en esta relación efímera. En este artículo, exploraremos qué es el cuffing, cómo puede afectar a las personas involucradas, por qué podría ser tóxico y cómo actuar ante este comportamiento.
De qué trata este comportamiento
El cuffing se refiere a una relación temporal que se forma durante los meses de otoño e invierno, generalmente entre septiembre y marzo. Durante esta temporada, las personas tienden a buscar una compañía estable, alguien con quien pasar las frías noches de invierno (porque ¿a quién no le gusta el plan manta, peli, sofá?).
El objetivo principal del cuffing es disfrutar de la calidez emocional y física que brinda una relación sin compromiso a largo plazo. O sea que es más habitual que ese vínculo se deje en verano, cuando llegan las vacaciones y las posibilidades de fiesta, planes y de conocer a muchas personas.
Las malas consecuencias
Si bien el cuffing puede parecer atractivo al principio, puede tener consecuencias emocionales negativas para ambas partes involucradas. Al tener una relación basada principalmente en la conveniencia y el aislamiento temporal, es probable que ambas personas estén más centradas en llenar un vacío emocional en lugar de establecer una conexión genuina. Esto puede llevar a una falta de compromiso real y una falta de respeto hacia los sentimientos de la otra persona.
Además, el cuffing se caracteriza por la superficialidad de la relación. Puede convertirse en una forma de evitar la soledad temporal, pero también puede conducir a la desvalorización de los sentimientos de la otra persona. Cuando una de las partes siente una mayor conexión emocional y desea profundizar en la relación, mientras que la otra solo busca compañía temporal, se crea un desequilibrio que puede resultar extremadamente doloroso para la persona más involucrada.
Cómo actuar ante este comportamiento
Si te encuentras en una relación de cuffing o sospechas que podrías estar en una, es importante reconocer tus propios sentimientos y comunicarlos de manera abierta y honesta. Expresar tus expectativas y necesidades te ayudará a determinar si ambas partes están en la misma sintonía.
Si descubres que la otra persona solo busca una relación temporal mientras tú buscas algo más significativo, es importante tener el valor de alejarte y buscar una relación que satisfaga tus deseos emocionales.