Ligar, camelar, filtrar... a veces es complicado, patético, sobreactuado o un completo desastre. Aquí van algunas técnicas de ligue no sexistas para acabar con la “guerra de sexos” y firmar la paz… o lo que surja.
1. Stop-babosos
Independientemente del nivel del alcohol en sangre, que un tío vocifere un “te la metía hasta reventar” o incluso un “es usted tan delicada como un pétalo de rosa en la primavera del desenfreno y las alergias” NO es sexy. De hecho, las estadísticas sobre la tasa de éxito que han tenido los hombres seduciendo a las mujeres con este tipo de comentarios se sitúan en… CERO. Hay que descartar al macho Neandertal y entender que las mujeres ni son mercancía, ni son objetos. Parece fácil, pero lograr que esta idea se refleje en los comportamientos y conductas de los chicos es todo un desafío…
Y tú, si no quieres que te tilden de acosadora no te comportes como una. Perseguir a un chico a todas partes y ser "de lo más sutil" matándole a likes y abrirle a todas horas vía Whatsapp demuestra solo una cosa: que tienes mucho tiempo libre. Está muy bien que tomes la iniciativa, pero sé clara e invítale a un café. Suele tener más efecto.
2. El zapato de cristal solo sirve para desangrarte
Muchas mujeres coinciden en que esta sociedad nos educa para ser princesas: débiles, sumisas, pasivas y en plena añoranza de un hombre que aparece “de la nada” para cuidarnos, protegernos y hacernos sentir valiosas. Así muestra la literatura, el cine, programas como Mujeres, Hombres y Viceversa o la gran mayoría de cuentos Disney. Las mujeres tenemos que romper con la creencia de que somos frágiles y dependientes.
Superar este rol nos dará seguridad para, entre otras cosas, llevar la iniciativa con ese tío de Tinder que nos hace el coño agua o cruzar miraditas con ese fofisano de la biblioteca que lee a Welsh. Además, mostrar confianza en una misma también dejará de espantar a aquellos tíos que ven en nosotras niñas a las que cuidar y salvar, en lugar de mujeres que son dueñas de sus vidas. ¿Quién quiere ser el descanso del guerrero pudiendo ser una gladiadora?
3. Un clásico, el humor
Hacer reír a la persona que te gusta puede ser una buena opción para a llamar su atención, b evidenciar que te mola fiu, fiu, c iniciar una conversación, d posicionarte como una persona atractiva más allá de tu físico a través de comentarios ingeniosos. Obviamente, en el terreno del coqueteo el humor tiene sus límites. Una chica haciendo chistes sobre su vagina puede provocar una estampida. Lo escribo por experiencia: si todo sigue su curso, se puede hablar de la vagina más tarde. Un chico que quiere ir de gracioso nos puede bajar el libido tal y como nos lo baja Pablo Motos. ¿A quién le parece sexy Pablo Motos haciendo un cunnilingus? Pues eso. Y no, las bromas sobre cómo sería un trío con nuestra mejor amiga no son a priori agradables ni divertidas.
4. Jaque mate al Cosmopolitan
Sí, tía, esto va por ti. Ser una chica cosmo es anti-erótico. Lo único que saca en claro un chico a medida que te haces la misteriosa y te muestras más preocupada por la marca de tu próximo gloss que por la conversación es que eres uni-neuronal. Así que, por favor, respira y déjate llevar. Ser natural es lo más sexy del mundo.
5. Trágate tu súper-yo
Una vez que hayas generado interés en la otra persona, es el momento de iniciar una conversación. Venderse como Ryan Gosling o Emma Watson es un error. Apuesta por la naturalidad y la espontaneidad. No alardees de tus logros ni de tus virtudes. Estás ligando, no presentando un currículo. Evita dejar todo el peso de la conversación a la otra persona ¡esto no es una entrevista! y controla los halagos. Aunque puedan ser bienvenidos, también existe la posibilidad de que resulten 'exagerados', 'molestos' o 'precipitados'. Al fin y al cabo, os acabáis de conocer...
6. Follar o no follar, that is the question
Llegados a este punto y si has tenido suerte, la complicidad es más que evidente y la conversación fluye. La atracción se palpa y nunca mejor dicho. Es hora de plantear si vamos a follar... ¿ya? ¿mañana? ¿mejor el finde? Esto es un tema peliagudo, pero... ¿qué importa ahora? Ya has ligado, ¿no era eso lo que querías? Mejor dejamos lo de follar para otro post...