3 razones para decirle gracias a tu pareja más a menudo

Es uno de los 19 ingredientes claves de las parejas saludables

Publicaciones en Instagram sobre la importancia de la gratitud. Charlas TED sobre la importancia de la gratitud. Ensayos filosóficos sobre la importancia de la gratitud. Mimimí. Probablemente estés incluso un poquito hartx del discurso. Pero no es porque esté vacío. Porque no lo está. Es porque en el fondo de tu corazón sabes que la gratitud traería mucha alegría a tu vida y, estando totalmente a tu alcance, no la estás poniendo en práctica por alguna razón. Quizás el egocentrismo. O la competitividad. O una especie de desconexión emocional con los demás. Ni tú lo sabes. Lo que sí deberías saber es que el cambio va más allá de ti: podría cambiar tu relación para siempre.

La importancia de la gratitud

Después de todo, y como muestra una revisión de más de 1.000 artículos de investigación, publicada en la revista especializada Journal of Family Theory & Reviewla gratitud es una de los 19 ingredientes claves de las buenas parejas. No parece mucho, pero piensa que, como dice la experta en desarrollo humano Tyler Jamison en Journal of Family Theory & Review, es también uno de los ingredientes más fáciles de aplicar. "Desde muy pequeño te enseñaron a decir gracias ante un gesto amable. No obstante, ofreces esa gratitud a la persona que te sostiene la puerta en la tienda pero no a tu pareja. Es fácil asumir que sabe que estás agradecido sin tener que decir nada. Un concepto erróneo".

Esa familiaridad con el agradecimiento es la primera razón para cultivarlo más en tu relación. La segunda es que no dependes de nadie más para hacerlo. En palabras de Jamison, "algunas estrategias para fortalecer relaciones requieren la colaboración de la otra persona" y pueden resultar más desafiantes. La gratitud, por el contrario, está en ti: basta con que comiences a agradecer pequeñas cositas como el hecho de que te escriba después de un examen para saber cómo te ha ido, que haga el esfuerzo de ir hasta tu casa porque tú no tenías ánimo para moverte esa tarde o simplemente que lave los platos. Eres autosuficiente en este cambio de actitud. Y eso es genial.

Una actitud contagiosa

No obstante, está claro que tu gratitud difícilmente será sostenible si la otra persona pasa de todo. Terminarás sintiendo que das mucho más de lo que recibes. Y eso siempre jode. Por suerte, y esta es la tercera razón alegada por Jamison, "la gratitud es contagiosa". Es una práctica que trae felicidad a la otra persona, que le hace sentir amada, que le impulsa a mostrarse naturalmente más amable y sí, también más agradecida con lo que tú le proporcionas en el día a día. Tal vez por eso sea tan beneficiosa para las relaciones. Al fin y al cabo, lima los malos rollos desde ambos lados. Os cambia el mood. Algo que puede marcar la diferencia en muchas situaciones.