Aunque los cánones de belleza hegemónicos están siendo sacudidos, hay parámetros físicos que resultan más atractivos que otros por cuestiones evolutivas. En el caso de los hombres, y según un estudio científico publicado en la Royal Society Open Science, del que un estudio científico publicado en la Royal Society Open Science, la característica que los hace más atractivos a ojos de las mujeres es la longitud de sus extremidades. Mientras que la preferencia por un tipo de complexión, altura o color de ojos depende de cada mujer, esta fijación por las extremidades sería eficaz en todos los casos.
Según la investigación, en la que los científicos han evaluado las respuesta de casi mil mujeres, estas prefieren a los hombres cuyas piernas midan exactamente la mitad de su altura total. El propio estudio explica que este fenómeno sexual responde al hecho de que unas piernas largas resultan más aptas para sobrevivir y por tanto atraen más. Por el contrario, unas piernas cortas son asociadas inconscientemente a enfermedades como la diabetes tipo 2, enfermedades coronarias o presión arterial alta.
Lo mismo ocurre con los brazos. La investigación también revela que los hombres cuyos brazos son largos resultan mucho más atractivos para las mujeres. Mientras tanto, los brazos cortos inspiran mentalmente problemas de demencia, malnutrición e incluso niveles socioeconómicos bajos. Una relación ancestral que, aunque hayamos medio olvidado, conocemos desde hace milenios. Porque es ahí precisamente, en la proporción del torso y las extremidades, donde los escultores griegos buscaron la belleza masculina durante siglos. No era casualidad.