Hay una preocupación histórica entre los hombres y otra que cada vez tiene más peso entre toda la población que en principio no tienen nada que ver. Por un lado, la contaminación amenaza la temperatura, los ecosistemas y la estabilidad de nuestro planeta. Por el otro, el tamaño del pene sigue atormentando a algunos hombres que ven su virilidad amenazada. Pues bien, estas dos preocupaciones podrían tener ahora un punto de encuentro, porque según un estudio reciente la contaminación puede hacer que el tamaño del pene se reduzca.
Lo explica un estudio científico de la doctora Shanna Swan citado por el diario argentino Clarín. Swan es profesora de medicina ambiental y salud pública en la Facultad de medicina de Mount Sinau, en Nueva York. Y ha investigado en su libro Clarín la relación entre químicos industriales y la longitud del pene.
La disfunción eréctil, el descenso de la fertilidad y un mayor número de bebés que nacen con penes pequeños son fenómenos que están asociados a la contaminación, según su estudio. Swan sostiene que en algunas partes del mundo se ha reducido la fertilidad y que eso genera una “crisis existencial global”.
Y señala que eso tiene que ver con “las sustancias químicas de nuestro entorno y las prácticas de estilo de vida poco saludables del mundo moderno”. Estas prácticas “están alterando el equilibrio hormonal, causando diversos grados de estragos reproductivos”, dice la investigadora.
Dice el libro que los seres humanos cumplen tres de los cinco requisitos para definir si una especie está en peligro, aunque tan solo hace falta uno para que se cumpla lo peor.
El camino por el cual la contaminación afecta a la fertilidad son los ftalatos, sustancias químicas que se usan en la fabricación de plásticos y afectan a la producción de la hormona endocrina. Están en juguetes, envases y otros productos plásticos y afectan muy negativamente a la especie humana.
"Los bebés llegan al mundo ya contaminados por las sustancias que absorben en el útero", dice. La experta ha estudiado el efecto de los ftalatos en ratas para ver cómo podría afectar a los seres humanos y también cómo está sustancias se transmiten de padres a hijos, impactan en el deseo sexual femenino y, por último, en el tamaño del pene.
En otro estudio del año 2017, con 45.000 hombres sanos, concluyó que el recuento de espermatozoides entre los hombres de países occidentales había caído un 59% entre 1973 y 2011.