Muere Isao Takahata, el realizador japonés que dio vida a Heidi y Marco

Muere Isao Takahata, el realizador japonés que dio vida a Heidi y Marco

Isao Takahata, el notorio realizador japonés cofundador del Studio Ghibli, ha muerto este jueves en un hospital de Tokio a causa de un cáncer de pulmón, según informó EFE. Ha fallecido con 82 años y durante su carrera nos regaló cuentos, como Heidi y Marco, que dejaron huella en informó. Él ha tenido que marcharse, pero ni el clásico “abuelito dime tú” ni el “no te vayas mamá” se borrarán nunca de nuestra memoria.

Cuando la prefectura de Mie le vio nacer en 1935 y años después sobrevivió a los bombarderos estadounidenses en la zona, estaba muy lejos de imaginar que acabaría convirtiéndose en uno de los más grandes de la industria de la animación. El principio de la trayectoria por la cual le conoceríamos todos empezó cuando estudió filología y literatura francesa en la Universidad de Tokio para después saltar al estudio Toei Animation.

Allí, en 1968, dirigió su primer largometraje animado, pero no el último. Menos de 10 años después, dibujó las montañas suizas de Heidi y al pueblo italiano de Marco para, en 1985, terminar fundando junto al director de cine Hayao Miyazaki el proyecto de su vida: Studio Ghilbi, considerado uno de los mejores estudios de animación del mundo.

Fue allí donde su andadura creativa fue por primera vez elogiada por la crítica internacional al hacer en 1988 la película Hotaru no Haka La tumba de las luciérnagas. Está basada en una novela homónima de Akiyuki Nosaka y habla de dos pequeños hermanos que tratan de sobrevivir en una ciudad costera nipona completamente devastada en los últimos meses de la II Guerra Mundial. Unas vivencias de dolor y superación que, probablemente, le recordaban a la infancia que se vio obligado a vivir.

Después regaló al mundo otros filmes como Pom Poko, Omoide Poro Poro Recuerdos del ayer y Hokekyo Tonari no Yamada-kun Mis vecinos los Yamada, 1999. Y se ganó una nominación al Óscar por la última película que dirigió, Kaguya-hime no Monogatari El cuento de la princesa Kaguya. Takahata se ha ido pero su contribución al mundo de la animación y a nuestras infancias permanece.

Quizás ninguno de nosotros conocíamos su nombre hasta el día de hoy, pero eso no quita que tomemos conciencia de que, detrás de las historias que alimentaron nuestra imaginación de pequeños, había un genio anónimo. Descansa en paz.