La semana pasada, Nela García se encontró de madrugada un móvil por en la calle de Madrid. No tenía código de seguridad lo cual extrañó muchísimo a Nela –¿quién lo lleva así?–, pero eso no era lo más raro: el móvil no tenía casi ninguna app ¡ni tan siquiera WhatsApp! y no tenía guardado ningún contacto. La única seña de identidad era una cuenta de Facebook y otra de Instagram, que pertenecían a una tal Marta Gutiérrez, de Madrid.
Intentó localizar a esta tal Marta Gutiérrez, sin amigos ni seguidores en ninguna app, y encontró que en realidad las fotografías eran de una tal Beatrice Williams, que había hecho un blog en 2008. Contactó con su familia para decirle que alguien estaba suplantando su indentidad, pero le contestó su padre diciendo que llevaba 8 años muerta.
Finalmente, miró el registro de llamadas. Y ahí había un número al que había llamado muchas veces. Cuando marcó el número, una extraña voz falsa le respondió diciendo “prueba número 12”, y echó un ojo a los mensajes y vio que estaban llenos de extraños códigos. Ahí acabó el hilo de Nela, preguntándose si es algún tipo de juego o es el móvil de algún estafador. Sin embargo, la magia de Twitter continuó analizando las pruebas y sacó mucho más, convirtiendo esta historia en una de esas que te dejan los pelos de punta.
Según descubrió Marc Cornellà, “el formato de los mensajes indica que son coordenadas y fechas. […] Las fechas y coordenadas coinciden con las fotos en instagram, y los cardinales creo que son la orientación con la que se tomó la foto”. Por lo tanto, cada foto de Instagram coincidía con cada uno de los mensajes. Pero lo auténticamente aterrador era lo último que apuntó Marc: el mensaje 12 recordemos, el teléfono dijo “prueba número 12” tenía unas coordenadas que marcaban justo el lugar donde Nela encontró el móvil y la fecha es para esta noche, el 21 de agosto a las 23:47.
Este hilo de Twitter está ardiendo de la viralidad. Muchos lo comparan al hilo de Manuel Bartual, lleno de misterio y muy adictivo. Toda la red social estará pendiente a cómo continua la historia. ¿Un juego de verdad, o una estrategia de márquetin de alguna empresa? Tendremos que esperar para ver cuál es el siguiente capítulo.