Todas las cosas por las que te han llamado 'zorra' alguna vez

Una lista de todas las cosas por las que te han llamado o has llamado zorra alguna vez. Hay que seguir trabajando para cambiar esa forma de pensar

A ti también te han llamado 'zorra', como a todas. Y no es ningún secreto porque, además, seguro que tú también has usado esa palabra para atacar a otra mujer, a menudo a sus espaldas. Todas y cada una de las veces que me insultaron con esa palabra, aunque tiene muchísimos sinónimos y variantes, fue atacando a mi naturaleza femenina y a lo que debo hacer con ella según algunas personas. Siento mucho si te molesta oírlo, pero todavía existen unas reglas no escritas sobre cómo debemos comportarnos en función de nuestro sexo. Lo que hay que cambiar no es mi forma de actuar, esa por la que me han llamado 'zorra', sino la creencia de que seguimos siendo unas 'zorras' por cualquiera de estas cosas.

1. Porque te guste el sexo

La represión de la sexualidad de la mujer es algo que viene de largo. Sí, ahora puedes follar con quien quieras, en la postura que quieras y, oye, ni siquiera tienes que tener una relación sentimental o estar casada para ello. Pero no te pases, si tu vida sexual es muy activa, si te gusta innovar y estar con muchas personas si has descubierto tu lado lésbico, ya ni hablemos de lo que 'eres', cuidado, porque podrías ser una 'guarrilla'. ¿Cuántas veces no habrás oído 'esta es una zorra' sobre alguna chica que tiene un rollo distinto cada sábado o que se ha acostado con un chico y, más tarde, con algún amigo suyo? Ambos han consentido y, de hecho, comentan lo gracioso que es que hayan compartido esa experiencia contigo. Pero la zorra sigues siendo tú.

2. Por decir que te gusta el sexo

A todas nos gusta. ¿Os creíais que lo hacíamos por complaceros? La cuestión es que no lo digas muy alto cuando haya hombres delante o muchos lo considerarán una provocación. Porque el sexo puede gustarnos, obviamente ellos quieren que sea así, pero de puertas para adentro. Si cuentas cómo o dónde lo hiciste el fin de año pasado con la misma actitud que lo haría tu hermano, por ejemplo, es que estás exhibiendo tu necesidad de sexo. Creen que lo pides porque no es algo 'habitual' que una chica hable así en público. Si lo hace es porque se está insinuando. Pero que esto no te haga dejar de decir en voz alta lo intensos que son tus orgasmos o cuál es tu postura favorita, eres tan libre de hablar de sexo como cualquiera esté quien esté delante.

3. Por salir cada semana a darlo todo con tus amigas

¿Por qué sale la gente? 'A ligar', te dirá la mayoría. Pero lo cierto es que muchas chicas lo consideran una forma de divertirse con sus amigas sin que tenga nada que ver con el sexo. Hay gente, hay música y, si se tercia, pues te dejas llevar. Sin embargo, la visión sobre las discotecas o bares que tienen muchos hombres es la de un buffet libre: carne fresca a montones donde escoger. Y si te quedas con hambre, te sirves otro filete distinto hasta que se acabe la noche. Y eso está genial siempre y cuando no implique creer que cualquier mujer que esté ahí lo está solo porque está disponible para ti. ¿Y si es verdad que lo que le gusta es salir a ligar cada semana igual que a él, recordémoslo? Pues estupendo, amiga, pero que no te llamen 'zorra' por ello.

4. Por vestir como quieras

Un día tu amiga se puso una falda muy corta o decidió que ese día no le daba la gana de ponerse sujetador. Tú te diste cuenta y soltaste un 'uy, qué guarrilla, ¿no?'. Te parece genial que vista así, pero puede que ya la hayas hecho sentir incómoda. Has usado un diminutivo y eso tiene que salvarte el pellejo, pero no. Solo le estás recordando que usar ciertas prendas hará que los demás sigan creyendo que exhibe su sexualidad y, por tanto, que quiere sexo o simplemente que no le importará si le dicen alguna guarrada por la calle. Ahora, piénsalo, ¿verdad que tú también dejaste de ponerte una prenda que a priori te encantaba solo porque enseñaba 'demasiado'?

5. Por hablar con chicos y NO acostarte o SÍ

Si eres antipática, te lo tienes muy creído y eres una 'zorra'. Si eres simpática y hablas con los amigos de tu nuevo ligue más de 15 minutos, es que quieres tema con todos. La cuestión es que no puedes intercambiar unas cuantas palabras con un desconocido sin que él y todo el mundo crea que te gusta. '¿Pero si no te gustaba por qué has pasado la noche hablando con él?' Pues mira, me caía bien y ya está. Me gusta conocer gente nueva, lo siento mucho. O, volviendo al punto 1, si te gusta y quieres irte a la cama con él y con otro la semana siguiente, recuerda: seguirás siendo una 'zorra' a la que le va la marcha. Pues sí, enorgullécete de ello.

6. Por quejarte cuando algo te parece injusto

Te han llamado 'zorra' por decir las cosas tal como las piensas. Algunos creen que eres un poco borde, pero tú estás convencida de que eres un amor y que lo único que haces es decir las cosas, así, del tirón. Aunque tú no lo sepas, tu compañera de trabajo cree que eres una 'amargada' porque siempre te estás quejando cuando algo no te parece justo, en voz alta y delante de todos. Pero no se acuerda de lo bien que le viene cuando al final consigues cambiar las cosas. La mujer que protesta y que lo hace de forma enérgica y firme suele recibir elogios como 'reprimida' o 'malfollada', algo que no tiene mucho sentido si sigues siendo una 'zorra'. ¿En qué quedamos, me lo tiro todo o 'necesito un buen polvo' para estar contenta y feliz y mantener la boca cerrada?

7. Porque te has sentido amenazada por otra mujer

Lo confieso, yo también lo he hecho. He llamado o he pensado que era una 'zorra' a otra chica por cualquiera de las situaciones anteriores y, mucho más, si es atractiva. Si su físico cumple con lo que los cánones de belleza dictan que es una 'tía buena' o más o menos atractiva, de repente y sin motivo más que ese, me ha caído mal. Nos sentimos amenazadas por otras mujeres porque nos han hecho creer que valemos lo que vale nuestro cuerpo, que cualquier hombre sigue a sus instintos primarios y ese novio que tienes sentado al lado ahora mismo está pensando lo buena que está y que, si pudiera, te cambiaría por ella. Nuestra autoestima se basa, en gran parte, en si nuestra apariencia es aceptada o no socialmente y por eso nos cae tan mal la 'zorra' de la amiga buenorra de nuestro novio. Pero, piénsalo, esa 'amiga buenorra' mañana podrías ser tú.

Crédito de la imagen: Maria Riot