Banzai Pipeline es una rompiente situada en Hawái, conocida por provocar la ola más difícil de surfear del mundo. Pasando sobre tres arrecifes de coral y superando los seis metros de altura si las condiciones son propicias, la ola de Pipeline ha sido por igual testigo de hazañas y tragedias. Grandes surfistas como Kelly Slater vivieron en ella alguno de sus mejores momentos, y cada año se celebra allí una prueba de la World Surf League.
Pero lejos de los focos y de la competición, muchos son los surfistas que buscan el valor para enfrentarse a la ola de Pipeline y escribir su propia historia. Entre todos ellos destaca el brasileño Derek Rabelo, que no solo lo consiguió, sino que lo hizo siendo completamente ciego.

Tal vez era su destino: no en vano su padre le había puesto el nombre del primer surfista hawaiano en ganar el Campeonato del Mundo, Derek Ho. Privado de visión desde su nacimiento por un glaucoma congénito, a los 17 años Rabelo decidió que nada sería un impedimento para que cumpliese el sueño que su progenitor tenía para él, el de surcar olas subido a una tabla.
"Escucho al océano y lo siento. Porque las olas hacen ruido cuando se acerca. Cada parte de la ola produce un sonido distinto, y así puedo saber hacia qué lado debo tomar la ola", explica el joven brasileño al medio Bored Panda.
Lo que parecía imposible era simplemente un reto para el que llevaba toda su vida preparándose, y es que cuando cumplió dos años, su padre le compró una tabla bodyboard desafiando a todos aquellos que veían en su sueño una locura. Pero si algo tienen los sueños, es que lo que los demás piensen de ellos da igual.

Y él creyó firmemente que la ola de Pipeline solo era un paso más en su vida, por lo que cuando le surgió la ocasión no dudó. Llegar a Hawái no fue sencillo dado el humilde origen de su familia, y para poder estar en la isla de Oahu tuvo que vender algunas cosas personales y pedir ayuda a sus amigos.
Unos amigos que siempre estuvieron con él, incluso cuando sufrió la discriminación de una sociedad que hasta le cerraba las puertas a la educación por su minusvalía. Pero su padre le dio un gran consejo: si en un sitio no te quieren, vete a otro. Y entre olas encontró un lugar donde sentirse libre.

La historia de su vida y de cómo cabalgó la ola de Pipeline está narrada en la película-documental Beyond Sight, producida por el surfista Bryan Jennings y el fotógrafo Bruno Lemos, a quienes la fuerza de Derek cautivó desde el principio. En la cinta, el propio Kelly Slater se maravilla ante la muestra de habilidades del joven brasileño al surfear una ola a la que muchos no se atreven ni a hacer frente.
Tras superar ese reto, Derek Rabelo se dedica a viajar por el mundo buscando otras olas, dando conferencias y, en definitiva, demostrando al mundo que nada es imposible si te lo propones.