Josef Ajram, el exitoso bróker de bolsa que hizo fama gracias a las pruebas de resistencia en las que participaba, tiene un libro titulado ¿Dónde está el límite? En él explica sus hazañas y sus grandes logros; cómo se prepara para las durísimas carreras y qué sentía al poner su cuerpo al límite de sus fuerzas.
Su iniciativa y sus ganas de romper barreras animaron a mucha gente a entrenarse y dedicarse en cuerpo y alma a las pruebas de ultrafondo. Aquí analizaremos algunas de las competiciones más célebres, aquellas cuya dificultad y dureza alcanzan unos niveles que a menudo son imposibles para el cuerpo humano. En fin, que estas carreras solo son aptas para valientes. O descerebrados.
Maratón Des Sables
Imagina correr un maratón. ¿Cansado, verdad? Ahora imagina correr otro maratón al día siguiente. ¿Imposible, no? Pues olvida todo esto. El maratón Des Sables consiste en correr seis maratones en siete días. Casi nada. Pero ahí no acaba la cosa. Todos ellos tienen lugar en una de las zonas más áridas y duras del planeta: el desierto del Sáhara. La prueba se celebra en el sur de Marruecos desde 1986. Cada año cientos de valientes súper preparados intentan afrontarla. Los participantes apenas cuentan con una mochila y algo de agua para cada día. Los mayores peligros son las insolaciones y los escorpiones. Pocos pueden aspirar a ganarla. El éxito, el mayor éxito posible, es acabar la carrera. Y si no que se lo pregunten a Luis Enrique. El entrenador del Barça participó hace unos años y logró terminarla.
4 Deserts
Para que os hagáis una idea, la prestigiosa revista TIME considera esta prueba “El test definitivo de la resistencia humana”. El nombre de la carrera ya nos indica cuál es su naturaleza. Consiste en correr 4 carreras en 4 desiertos de alrededor del mundo, cada uno con unas condiciones climatológicas extremas completamente diferentes. Hay que superar el desierto más caluroso Sáhara, el más frío Antártida, el más árido Atacama y el más ventoso Gobi. La participación está limitada a solo 200 corredores y, evidentemente, no puede presentarse quien quiera. Hay que atesorar unas marcas previas y unos requisitos necesarios para poder lanzarse a esta aventura. Desde que se fundó en el año 2003 solo 85 personas han podido completar el Grand Slam en 1 año. Ah, me olvidaba, cada una de las cuatro pruebas consta de nada más y nada menos que 250 kilómetros. Tienen 7 días y 6 etapas para finalizar la carrera. Una auténtica burrada.
1. Sahara Race
Esta prueba, la primera de todas, se celebraba habitualmente en Egipto. Los problemas políticos y la inestabilidad en el país obligaron a trasladar la carrera al desierto de Jordania, un escenario que guarda paralelismos en lo que a las condiciones climáticas se refiere. Los corredores deben superar dunas y un calor sofocante.
2. Atacama Crossing
Esta prueba tiene lugar en el chileno desierto de Atacama, un enclave misterioso y místico. Sobre un terreno seco, árido y pedregoso, los corredores deben superar desniveles de más de 2500 metros. La peligrosidad del terreno y el tiempo tan cambiante son solo algunos de los obstáculos que deben superar los corredores.
3. Gobi March
Carrera celebrada en China, en el desierto más ventoso del mundo. Un escenario interminable que parece no tener fin.
4. The Last Desert
Antártida. La vida en civilización es imposible en esta región. Los corredores deben hacer frente a temperaturas inferiores a los 40 grados bajo 0.