No sé tú, pero a mí, en cuanto escucho las palabras Cristiano Ronaldo, se me revuelve el estómago recordando escenas como esta.

Un futbolista que prefiere lucir abdominales antes que celebrar con sus compañeros un título pues que quieres que te diga, muy normal no me parece. Pero detrás de ese Cristiano egocéntrico y arrogante. Hay un chaval portugués que nunca va a olvidar sus comienzos complicados y que siempre está dispuesto a ayudar. Sé que puede ser difícil de creer, pero hay gestos y hechos que hablan por si solos.
Primer gran contrato para su familia

En verano de 2003 Cristiano dejaba el Sporting de Lisboa para fichar por el Manchester United. Firmaba su primer contrato de estrella y solo pensó en su familia: “Lo primero que hice con mi sueldo del United fue decirle a mi mamá que deje de trabajar. También ayudé a mis hermanos y hermanas. Cuando mi familia no está bien, yo no estoy tranquilo, no me siento nada bien. Siempre me han ayudado cuando lo he necesitado”, explicó Ronaldo según cita el diario La República.

Cristiano tiene una obsesión: marcar goles. Siempre quiere marcar todos los penaltis, faltas y cualquier oportunidad que tenga para conseguir ser el máximo goleador mundial y ganar así la Bota de Oro. Teniendo esta 'obsesión' pensarás que tiene este trofeo en su mesita de noche para mirarlo y abrazarse a él antes de ir a dormir, pues no. Subastó su Bota de Oro de 2011 y donó el millón y medio de euros que consiguió con ella a los niños palestinos de Gaza.
El trágico tsunami y un niño al que salvó la vida

Era el año 2004 cuando se produjo el dramático Tsunami en el sudeste asiático. En este desastre hubo una foto que conmocionó al mundo. La imagen de un niño que, 21 días después de la tragedia, apareció sano y salvo. Se llama Martunis, en ese momento tenía 7 años y lo encontraron con la camiseta de la selección nacional de Portugal, ya que la tragedia le sorprendió mientras jugaba a fútbol con sus amigos.
La foto dio la vuelta al mundo y el pobre niño se quedó huérfano y sin casa. Cristiano al ver la imagen fue a conocerle, le pagó la reconstrucción de su casa, le financió parte de su vida y ha ido a visitarle varias veces estos últimos años. El niño siguió jugando a fútbol y ahora que se ha hecho mayor, y con la ayuda de Cristiano, juega en las categorías inferiores del Sporting de Lisboa.
La prima de la última Champions

Hace bien poco Cristiano levantó la codiciada Champions League para el Real Madrid. Por conseguir este logró él, y sus compañeros, fueron premiados por el club con 600.000 euros por cabeza. Cristiano ya ha comunicado a su representante que se encargue de donarlo a una ONG. Nos quitamos el sombrero.
Pequeños gestos con grandes lecciones
En los detalles es donde se ve de qué pasta está hecho cada uno y Cristiano ha tenido detallazos en los que ha demostrado que es muy buen tipo. Aunque si nos tenemos que quedar con uno sería con este. Defender a un niño que lo intenta y recriminar a sus compañeros que no se pueden reír de alguien que se esfuerza es la mejor lección que se les puede enseñar.
Mira Cristiano solo tengo una cosa más que añadir, si existiera el Balón de Oro del señorío tendrías muchos más de los que ya tienes #Respect.