Hay días en los que te sale la vena cocinilla y te da por innovar. Te pones el delantal, te lavas las manos y sacas la tabla de cortar. Y una vez has hecho todo eso, te preguntas con cara de panoli ¿y ahora qué?. No pasa nada, aquí te dejo unas recetas con un toque muy original para que se enamoren de ti tus amigos o familiares. Eso de recurrir a mezclar las sobras de la semana para salir del paso ya no cuela como 'cocina creativa'. Sal del típico huevo frito y atrévete con estos platazos milenial.
Para empezar: Chips de manzana

Deja de hincharte a patatas fritas antes de comer. Éste es un aperitivo bien sano y bajo en calorías. Eso sí, apúntate esto para una comida organizada, en algo improvisado ya te habrás quedado sin patatas. Empecemos. Las manzanas que utilices, mejor que sean dulces. Si te gusta la idea, apunta: hay que cortar las manzanas en rodajas muy finas. Después exprime un limón y rebájalo con agua. Coge un cazo y mezcla 125 gramos de azúcar, otros 125 de agua y déjalo hervir. Luego sólo hay que echar las rodajas de manzana y dejarlas un rato. Saca los trozos y hornearlos a 100 grados con aire caliente durante dos horas. Cuando acaben tendrás un aperitivo sano y crujiente como pocos.
Para los más golosos: Pasta al chocolate

Parece una guarrada, pero no lo es. Dulce, pero salado. Es una receta exquisita y merece la pena insistir después de las caras de asco que recibirás cuando la anuncies. Allá vamos: Lo que necesitas son 250 gramos de pasta, 75 gramos de chocolate blanco, 100 gramos de queso mascarpone, 100 más de queso de cabra, 50 mililitros de caldo de pollo, 1 cebolla, 1 cucharada de mantequilla, un poco de leche semidesnatada, una pizca de pimienta molida, 1 nuez moscada, sal y chocolate negro rallado para terminar. Primero, la cebolla erogada con sal y mantequilla a fuego lento. Después se le añade el caldo de pollo hasta que se evapore. Más tarde, la pasta. Luego la leche, y lo dejamos cocer hasta que la pasta esté al dente. Al retirarlo del fuego se le echa el queso mascarpone, el de cabra y el chocolate blanco. Y para terminar, la nuez moscada y el chocolate negro rallado. Increíble pero cierto.
Made in Ecuador: Pollo a la Coca Cola con arroz

Es importante que esta receta se haga con Coca Cola y no con Pepsi. Si eres del otro bando, lo sentimos mucho, pero aquí los matices son cruciales para conseguir un pollo muy especial. Ahí van las claves: primero hay que sofreír la cebolla, ajo, pimienta y sal a fuego lento. Después hay que añadir los muslos de pollo hasta que reduzca el sofrito. Y lo último es añadir la Coca Cola. Dejarlo estar unos 10 minutos a fuego lento para que también reduzca el gas. E incluso, si quieres espesarlo un poquito más, también puedes echarle una cucharada de harina y remover bien. El pollo a la Coca Cola es una receta típica ecuatoriana, un orgullo nacional y un plato riquísimo, sobre todo para los amantes de la cafeína.
Y de postre: Helado de cerveza

No se me ocurre nada más refrescante para acabar que un helado de cerveza. Es fácil. Sólo necesitas 8 yemas de huevo, 1/2 vaso de azúcar, 1 otro de cerveza y 1 taza de nata para montar. Primero se baten las yemas de huevo con el azúcar hasta que la mezcla sea consistente. Después hay que poner la nata y la cerveza en una cacerola a fuego lento un par de minutos. Ojo, no remover. Luego se le añade la mezcla de huevo y azúcar y, ahora sí, hay que removerlo. De ahí, al congelador unos 45 minutos y listo. Ya tenemos el helado de cerveza para servir. No podrás decir que no está para chuparse los dedos. Y prometido, no emborracha qué pena, ¿no?.