Todo comenzó en un gimnasio de Granollers, una pequeña ciudad a pocos kilómetros de Barcelona. Allí, en una pegajosa tarde del verano 2016, dos tipos unieron su sudor y sus neuronas para crear la canción que está destinada a ser el hit de este verano: 'Lagarta'. Con esta obra de arte, Sandro Rey —el ‘vidente de España’ como se hace llamar a sus casi 50 años— y su agente Juan Miguel —al que algunos conocen como el ruso de la coleta o el Nacho Vidal del Vallés—, pretenden la milagrosa conversión de vidente mediático a estrella del panorama musical de Benidorm.
“Nací en el barrio de Santiago en Jerez de la Frontera donde nació la bulería. En mi casa el que no canta, toca las palmas y, el que no, baila. Así que yo ya tenía el gusanillo hace tiempo”, explica el mismísimo Sandro que, la verdad sea dicha, tiene tanto palique o más que pelazo en la cabeza. Según cuenta, “cuando llevas un tiempo en la tele comienzas a conocer a tanta gente que llegas a un punto en el que te planteas sacar un tema musical”. Sin embargo, su primera experiencia no fue todo lo positiva que debería haber sido y el proyecto fue abortado.
Pero con Juanmi, el flechazo fue instantáneo. “Estaba haciendo abdominales cuando llegó un tío con unos pantalones muy cortos, tirantes y un pañuelo de Harley Davidson y me dijo: ‘0ye Sandro, para lo que necesites aquí estoy’. Así fue y ahora somos trending topic”, resume el vidente. Otra cosa ya fue la elección del título 'Lagarta', un nombrecito que casi le causa un infarto a su productor musical, David Quijada. “Hay un 10-15% de mujeres y de hombres que son lagartonas y lagartones, así que yo dediqué a esas mujeres que buscan a los demás con ánimo de lucro”, dice Sandro que, como no podía ser de otra manera, protagoniza el videoclip.

Durante algo más de tres minutos, los cuerpos voluptuosos y musculosos de una veintena de chicos y chicas —el casting fue en el mismo gimnasio— se contonean en una especie de guateque veraniego mientras la supuesta “lagarta” busca a su víctima que, finalmente, resulta ser Juanmi ya que el vidente la rechaza porque ‘la ve venir’. Pura metáfora. “A mí las feministas no me pueden atacar de machista porque hay un tanto por ciento de mujeres lagartas y la prueba son los programas del corazón. Aquella que se ha liado con aquel por dinero y ahora le ha puesto los cuernos con otro porque tiene más dinero”, se justifica Sandro consciente del ataque masivo de haters al videoclip.
En las poco más de dos semanas que lleva colgado en Youtube, Lagarta tiene casi 300 mil visualizaciones, más de 1.500 likes, pero también unos 9.000 dislikes. "Las estadísticas que hay por ahí dicen que España es el país donde más envidia hay. Entonces, toda la gente que le da al pulgar hacia abajo es que les gusta mi tema musical porque si no les gustase no lo escucharían”, resume. Pero su crítica no acaba aquí, lo que de verdad jode a Sandro es la hipocresía de parte de sus no-fans: “Son los que luego te los encuentras en la calle, se hacen una foto contigo, te dan una palmada y te dicen ‘es que eres un crack tío’ y después suben la foto y te ponen verde los cabrones. Aunque una cosa es cierta: de la envidia nace la fama”.
Sin embargo, no parece un tipo rencoroso y lanza sus bendiciones habituales a todos los que este verano bailarán su hit. “Lo que quiero transmitir con este tema es que la gente se divierta y que ligue. En mi vídeo musical salen muchos ojetes tío, están buenísimas todas las tías. Con mi tema se va a follar mucho en este país”, concluye. Solo el tiempo dirá si bailamos, follamos o nos suicidamos escuchando el tema. Mientras tanto, cada visualización, cada entrevista concedida por Sandro y Juanmi es un paso más para apartar a Leticia Sabater y su ¡Toma pepinazo! de la lucha por la canción del verano. Solo uno de ellos podrá ocupar el glorioso trono de Georgie Dan y King África. Estás avisado.