La década de los 80’s estuvo llena de grandes estrenos en la gran pantalla. Y aunque hablar de HD o Blu-ray sonase a chino, a la gente también le encantaba ver las películas desde el sofá de su casa e, incluso, esperar a que la cinta VHS se rebobinara porque el último en verla no lo había hecho ¡maldito vago!. Sin embargo, no hacía falta tanta tecnología cuando una película de verdad te gustaba: te la comprabas, la ponías en la estantería de las películas y la veías unas 20 veces hasta que se acababa rallando. Y es que en el cine de los 80’s podía pasar de todo, y es por eso por lo que a veces desearía que mi vida formase parte de la ficción de aquellos años.
Número de baile espontáneo
Una cosa es que los protagonistas de “Dirty Dancing” hagan el número de baile final y les salga perfecto no es de extrañar, puesto que han ensayado los pasos mil veces, pero en una auténtica película de los 80’s los asistentes también saben bailar, se acaban levantando de sus sillas y se unen a los protagonistas formando un gran número de baile, donde nadie le pisa los pies al de al lado ni nada de eso, todo estupendamente coreografiado.Guerras de sexos que terminan en amor
Están las comedias románticas y luego, a años luz, “Cuando Harry encontró a Sally”; una película que demuestra que, a pesar de las diferencias existentes entre hombres y mujeres, podemos acabar entendiéndonos muy bien. Bueno, puede que lo único que no sepan ellos es cuando fingimos un orgasmo guiño a Meg Ryan que lo fingió durante horas para rodar una escena.No hay sueños imposibles
Si algo nos enseñó Mr. Keating Robin Williams en “El Club de los Poetas Muertos” fue el concepto del carpe diem. Nada se pierde con intentarlo. Y lo que es más importante, nunca pierdas lo que jamás podrás volver a recuperar: el tiempo.Su visión del siglo XXI
Desde los 80’s se especulaba cómo viviríamos en el siglo XXI. Varias películas imaginaban un futuro distópico en el que las máquinas tomarían el control. Aunque no sería tan descabellado pensar que, en cierto modo, nos controlan, somos dependientes y más de uno necesita que “Terminator” se lo lleve a dar un paseo en moto para que suelte el móvil de una vez.Viajes en el tiempo
En el cine de los 80’s cualquier cosa servía para viajar en el tiempo, como por ejemplo, un coche. A quién no le gustaría darse uno de esos viajes con Doc y Marty McFly a través del tiempo y vivir descabelladas aventuras llenas de humor.Canciones para todo
Si se rueda una película sobre unos tipos que cazan fantasmas hay que componer una canción que se llame Ghostbusters, eso por descontado. Pero lo mejor es que canciones como estas acababan convirtiéndose en números uno y bailándose en todas las pistas de baile. Aunque claro, en la vida real nunca saldrá el número de baile tan bien coreografiado como en las películas.Y de mascota un gremlim
Si viviésemos en una película de los 80’s nuestra mascota podría ser perfectamente un gremlin en vez de un perro o un gato. Y con suerte, una noche cualquiera también podrás encontrarte a un pequeño y temeroso extraterrestre y llevártelo a casa para cuidarlo.Crédito de la imagen: flavorpill