15 Cosas Que Puedes Hacer Para Perfeccionar El Arte De Ser Un Poco Cabrón
Alejandro Galante
Entretenimiento
Lo reconozco, soy un poco cabrón. Pero no de esos cabrones que van por ahí jodiendo a la gente gratuitamente; si lo hago, lo hago con estilo. Sin embargo, aunque llevo años perfeccionando mi técnica, aún hay ciertas cosas que no me he atrevido a hacer por miedo a que me partan la cara. Pero algún día espero tener el valor y los recursos para llevar a cabo estas cabronadas sin morir en el intento:
1. Entrar a una iglesia mientras se celebra una boda, y haciendo ver que no hay nadie, gritar: "Señor, ¿por qué inventaste el matrimonio? ¡Me has jodido la vida!".
2. Ponerme delante de alguien en la calle, tirar algo al suelo, y decirle: "Recógelo, plebeyo". Si se niega, gritarle: "¡Haré que te cuelguen por esto, bastardo!".
3. Acercarme muy serio a un desconocido que esté acompañado y susurrarle: "Sé tu secreto. Si no estás esta noche a las 12 en el lugar de siempre, lo contaré todo".
4. Ir al cine a ver la última peli de moda y antes de que empiece decir muy fuerte cómo acaba.
5. Quedarme parado en medio de una puerta impidiendo el paso y hacer caso omiso a la gente que intenta pasar.
6. Subir a un avión y justo antes de despegar sacar el móvil y mientras escribes un mensaje, susurrar: "La bomba está preparada. Espero que mi sacrificio siga a nuestra causa".
7. Seguir muy de cerca a una persona al azar y, cuando se gire para increparme, hacerme el sueco.
8. Ir a una tienda, preguntarle a la persona de detrás en la cola qué va a comprar, y cuando llegue mi turno pedir todas las existencias de ese producto.
9. Mirar a alguien fijamente en el metro y cuando esa persona me mire a mí, decirle: "Tanto mirarme haces que me sienta incómodo".
10. Ir a una tienda de electrónica, pedir ayuda a un dependiente, hacer que te enseñe todas las televisiones disponibles y cuando acabe decir: "Gracias, ¿dónde tenéis las tostadoras?".
11. Acercarme a una pareja y decirle a ella: "Estos últimos meses han sido los mejores de mi vida, cásate conmigo, por favor". Con anillo y todo.
12. Ir a cenar a un restaurante y, cuando me esté acabando el plato, poner dentro varios pelos y montar un numerito.
13. Entrar a un ascensor con mucha gente y nada más cerrarse las puertas tirarme un pedo.
14. Pedir comida a domicilio a las 3 de la mañana y dar los datos de un vecino.
15. Llenar un bote de gomina con pegamento a modo de indirecta para el amigo que lleva tres meses sin contarse el pelo.
Si alguien se atreve a probar alguna de estas u otras de su propia cosecha, que lo grabe en vídeo y nos lo mande para que podamos reírnos todos. Eso sí, existen dos normas:
- No hacer cabronadas que pongan en peligro la integridad física de la gente (salvo la tuya).
- Si por algún motivo la cabronada provoca un conflicto entre personas ajenas, debes admitir que estabas de coña.
Crédito de la imagen: giphy.com